La fundación cuenta con “un componente de voluntariado muy importante”, según explicó el director de Voluntariado de la Fundación ANAR, Francisco Abengózar, ya que participan “alrededor de 300 voluntarios al año”.

Abengózar detalló que se trata de un número “muy considerable de voluntarios teniendo en cuenta el perfil tan específico que tenemos porque son, en su mayoría, psicólogos, pero también trabajadores sociales y abogados” y “el 90% de los que pasan por aquí recomiendan la actividad a otros compañeros”.

El director de Programas de la Fundación ANAR, Benjamín Ballesteros, aclaró que una vez entran “realizan un proceso de formación bastante intenso y efectivo” y “cuando llevan 300 horas como voluntario con nosotros les damos un certificado que es casi como haber hecho un curso de especificación, como un máster que está avalado por el propio Colegio Oficial de Psicólogos”.

369.969 LLAMADAS EN 2015

La Fundación ANAR cuenta con diferentes números de teléfono: el Teléfono ANAR de Ayuda a Niños y Adolescentes, utilizado mayoritariamente por jóvenes de entre 14 y 17 años; el Teléfono ANAR del Adulto y la Familia, para tratar asuntos referentes a niños de 0-7 años principalmente, y el Teléfono ANAR para Casos de Niños Desaparecidos, según explicó la directora del Teléfono ANAR, Leticia Mata.

De las 369.969 llamadas que se recibieron el año pasado “no hubo ni una que no fuera atendida por un psicólogo y esto es porque hay muchos niños que no se atreven en un momento determinado cuando hablan con nosotros a contarte lo que realmente les ocurre”, es decir, “esos niños no te dicen “mi padre abusa sexualmente de mi” a la primera llamada, tiene que haber siempre un experto que sepa tratarles con la sensibilidad necesaria” y para ello “necesitamos 7, 10 y hasta 15 llamadas”, indicó Ballesteros.

Asimismo, afirmó que “todo el personal que trabaja aquí ha sido voluntario en ANAR, eso significa que son personas que tienen una vocación por la infancia” y añadió que “todos estamos de acuerdo en que si hay un euro, tiene que ser para abrir una línea más, porque lo que no puede haber es un niño comunicando”.

PROGRAMA BUENTRATO

Además, la Fundación ANAR cuenta con diferentes programas destinados a ofrecer ayuda psicológica y social a los niños y adeloscentes, como el programa Buentrato, cuya responsable, Graciela Sánchez, explicó que “se caracteriza porque le damos mucho protagonismo a los propios adolescentes, porque nos hemos dado cuenta que no es lo mismo que sean los adultos los que lleguen y den una charla a que sean los propios chicos los que lo hagan”.

Para ello, “trabajamos con toda Secundaria, pedimos algunos voluntarios, les formamos y luego ellos van a los cursos de 1º y 2º de ESO y dan una charla intentando inculcarles esos valores”.

De esta forma, se intenta acabar con los valores que se fomentan desde la publicidad, las series de televisión o las películas en las que “el chico tiene que ser un malote para ser guay, que la chica se tiene que meter en líos” y enseñarles que con esas ideas “la convivencia no es buena”.