El conductor había eludido un control policial y tuvo que ser interceptado por una patrulla de la Ertzaintza, según informó hoy la policía autónoma vasca.

Los hechos ocurrieron alrededor de las 1.20 horas, cuando un Citröen Berlingo, que circulaba desde el Alto de Miracruz hacia Gros, giró bruscamente en dirección al paseo de Ulia, al percatarse de que había un control de la Ertzaintza un poco más adelante.

Un coche patrulla siguió al vehículo al percatarse de la maniobra y los agentes lo detuvieron instantes más tarde. Los "ertzainas" pidieron al conductor que bajara del automóvil, pero éste reinició la marcha bruscamente y huyó a gran velocidad.

El coche fue interceptado unos 200 metros más adelante. Los agentes realizaron al conductor la prueba de alcoholemia, que arrojó unas tasas positivas de 0,39 miligramos por litro en sangre, la primera vez, y 0,34 miligramos en la segunda prueba.

Además, los "ertzaintzas" constataron en la base de datos de la policía autónoma vasca que el automovilista tenía retirado el permiso de circulación por orden judicial.