Así lo manifestó Víctor Bayarri, miembro de la Comisión de Colaboración Asociativa que el Cermi ha creado con el fin de impulsar la cooperación entre entidades. Junto a Pilar Villarino, directora ejecutiva del Cermi, fue el encargado de clausurar las jornadas que la plataforma de la discapacidad ha celebrado en el Complejo Deportivo y Cultural de la ONCE, con el fin de abordar durante dos días los beneficios de la colaboración interasociativa.

Bayarri recordó que “el Cermi viene impulsando la colaboración y la convergencia entre las asociaciones no sólo en el ámbito de la discapacidad, sino también con el conjunto del Tercer Sector”. Además, pidió que se desarrollen procesos de cooperación teniendo en cuenta los objetivos, basados en la confianza y pensando siempre en el bienestar de las personas, “intentando dejar a un lado los personalismos, que a veces son inevitables”.

CASOS PRÁCTICOS

Durante las jornadas del Cermi se expusieron numerosos ejemplos de éxito de colaboración interasociativa que sirvieron para apuntalar el compromiso que el presidente de la entidad, Luis Cayo Pérez Bueno, mostró en la inauguración del encuentro, fijando como uno de los objetivos del Cermi el dar un mayor impulso a la colaboración entre entidades.

En primer lugar, intervino Ana Blanco, trabajadora social de la Asociación de Padres de Alumnos con Discapacidad en Aulas de la Provincia de las Palmas (Apaelp), quien presentó el proyecto ‘Arte y discapacidad, destinado a favorecer la creación artística de las personas con discapacidad. La iniciativa se ha llevado a cabo en colaboración con diferentes organizaciones. “ha sido una experiencia muy enriquecedora, porque los profesionales consiguen además disfrutar y aprender con los chicos que participan”, agregó esta trabajadora social.

Por su parte, Antonio Mayor, director de Comunicación de la ONCE, destacó la necesidad de “colaborar entre las entidades, impulsando la identidad de las mismas”, proceso en el que la ONCE se implica, como hace por ejemplo con el cupón que en numerosas ocasiones dedica a diferentes organizaciones del ámbito de la discapacidad.

“Los mensajes que portan los cupones llegan a mucha gente, porque lo reciben las personas que compran el cupón y los que no”, agregó Antonio Mayor, quien subrayó que “se trata además de una medida sin coste económico, hecho muy importante en los tiempos que corren”.

Mientras, Roberto Álvarez, presidente de la Asociación Cántabra en Favor de las Personas con Discapacidad Intelectual (Ampros), habló sobre el proceso de colaboración que las entidades de la discapacidad de Cantabria han conseguido poner en marcha.

Según explicó, se empezó a hacer en “un contexto de crisis, donde la realidad de las asociaciones de la discapacidad no era sencilla pero como había objetivos comunes se trató de unificar el discurso del sector para dar respuesta a todas las necesidades de la vida de las personas con discapacidad”, de forma que se han conseguido mejorar aspectos como la evaluación de las medidas que se van aplicando.

En cuanto al proyecto ‘Red compartir’, Pablo González afirmó que “esta red está compuesta por muchas organizaciones” que trabajan en el norte del país. EL proyecto sirve para evaluar las políticas de apoyo a las personas con discapacidad; estudiar la mejora de la calidad de vida, y el impacto en la sociedad.

COMPRAS DIVERSIDAD

Javier Luengo, representante de Plena Inclusión Madrid, expuso las principales claves del proyecto ‘Compras diversidad’, que pretendía “no sólo defendernos de la crisis económica, sino también mirar dentro de nosotros mismos para ver cómo podíamos hacer mejor las cosas”.

La iniciativa sirve para compartir los gastos “y hacernos más fuertes frente a los proveedores y poder dar los mejores apoyos a las personas con discapacidad intelectual”. En concreto, 20 organizaciones de la discapacidad intelectual unificamos los gastos que las entidades tenían, logrando un ahorro por asociación de más del 8%, amén de haberse creado la primera central de compras de la discapacidad sin ánimo de lucro.

Además, Laia Rivas habló sobre el proyecto Centro de Recursos para la autonomía Personal (Crapvi) en la provincia de Lleida, dado que es la directora del mismo. Rivas comentó que fue creado por diferentes organizaciones del sector de la discapacidad física. “Este proyecto pretende mejorar la calidad de vida y el empoderamiento de las personas con discapacidad”, afirmó esta experta, quien subrayó que el Crapvi presta asesoramiento sobre accesibilidad, fomenta la investigación en ayudas técnicas e impulsa formación en vida independiente, tanto a personas con discapacidad como a sus familias.

Por otra parte, Juan Recio, en representación de asprodes, organización que trabaja en favor de las personas con discapacidad intelectual, recordó que en Salamanca hubo años en los que había muy poca colaboración entre entidades de la discapacidad, pero después se han ido estrechando lazos de cooperación.

En concreto, puso el ejemplo de la Asociación Salmantina de Esclerosis Múltiple (asdem) y asprodes, “que trabajamos desde el primer momento desde el plano de la confianza. Lo normal es que Asprodes hubiera absorbido a Asdem por ser de menor tamaño, y nunca se barajó esa posibilidad”. Juan Recio explicó que al acordar un mismo proyecto, pueden trabajar de forma conjunta para entre otras cosas, prestar atención residencial o de vida independiente a las personas con discapacidad.

Por último, dos profesionales de la Asociación de Padres de Niños con Problemas de Audición y Lenguaje (Aspanpal), entidad que trabaja en la Región de Murcia, destacaron el apoyo de la ONCE en materia de adaptación de tecnologías para que las personas con este tipo de discapacidad puedan comunicarse mejor. Así, pusieron como ejemplo el caso de dos niños que pudieron mejorar la forma de comunicarse gracias a los apoyos recibidos con lengua de signos y con ayudas ópticas.