Margallo asegura que la Marca España será “tan fuerte o débil como los españoles quieran que sea”

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación en funciones, José Manuel García-Margallo, aseguró este miércoles que la Marca España no es propiedad del Gobierno sino que es un proyecto “al servicio de España”, por lo que será “tan fuerte o débil como los españoles quieran que sea”.

Así se pronunció el jefe de la diplomacia española durante la presentación en la Casa América de Madrid del informe ‘España contigo. Fortalezas de la Marca España’. En este acto estuvieron presentes el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy; los ministros de Interior, Justicia y Fomento en funciones, Jorge Fernández Díaz, Rafael Catalá y Ana Pastor; el Alto Comisionado para la Marca España, Carlos Espinosa de los Monteros; y José Luis Bonet, presidente de la Cámara de Comercio de España, entre otras autoridades.

En ese sentido, Margallo explicó que cuando Marca España se puso en marcha en 2012 el “horizonte que se cernía sobre España era, como mínimo, tormentoso”, lo que le sirvió para poner en valor el “trabajo, esfuerzo, talento y amor a su país” de aquellas personas que contribuyeron a dar forma al proyecto.

“Tuvieron una confianza a prueba de crisis y primas de riesgo y dieron a conocer su país, tal y como es. Hoy el horizonte está más despejado que el que en 2011.Es momento de reconocer la fe y empeño de las personas que lo han hecho posible”, sentenció.

Del mismo modo, Margallo destacó que Marca España es la “reedición contemporánea del milagro de los panes y los peces”, ya que se ha construido “sin presupuesto” y sin “puestos adicionales de trabajo”.

PESIMISMO ESPAÑOL

Esto le sirvió para subrayar que a lo largo de su historia España ha sido un país, cuya imagen “ha sido casi siempre peor que la realidad”, por lo que evocó el espíritu de los regeneracionistas de finales del siglo XIX y principios del XX que “se volcaron en esa España a la que amaban y que no les gustaba” frente a los “nacionalismos periféricos que apostaron por disolver la unidad de España”.

Por ello, Margallo aseveró que en 2011 la imagen de España era “peor que su realidad”, lo que provocó que se pusiera en marcha un proyecto como el de Marca España, que fue “más complicada de lo esperado”, ya que faltaba un “marco de referencia propio” con el que recuperar la confianza.

Margallo sentenció que la “autoflagelación forma parte de nuestro ADN colectivo”, por lo que animó a “españolear, a hablar bien de España”, ya que “los números no mienten y dicen que estamos mucho mejor que hace cuatro años, aunque sabemos que hay cosas que andan mal y lo que hay que hacer para mejorarlas.

A su vez, Margallo dijo que la Marca España no es propiedad del Gobierno sino que es un proyecto “al servicio de España”, por lo que será “tan fuerte o débil como los españoles quieran que sea”.

ADMIRACIÓN EN EL EXTRANJERO

Por su parte, Espinosa de los Monteros contrastó la actitud de los extranjeros, que “admiran” lo que se hace en España, con la de los españoles.

“Si no estamos dispuestos a reconocer, si seguimos deleitándonos con el pesimismo, algo estamos haciendo mal y tenemos que corregir. Desde Marca España nos hemos encargado de divulgar nuestros logros y todo aquello de lo que tenemos que seguir sintiendo orgullosos”, comentó.

Por último, José María Cubillo, autor del informe, aseveró que la “auténtica Marca España” es la que se conforma entre “todos los españoles todos los días”, mientras que Bonet advirtió de que los empresarios españoles reclamarán al próximo Gobierno que fomente la internacionalización de las empresas, porque “en los próximos diez años nos la jugamos y tenemos la posibilidad de ganar”.

(SERVIMEDIA)
01 Jun 2016
MST/MFN/gja