En un auto, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 6 acuerda el levantamiento parcial del secreto de la causa, decretado en abril de 2014, y que posteriormente dio lugar a la formación de doce piezas.

Ahora, el juez acuerda abrir una nueva pieza separada, la número 13, sobre la que no pesa el secreto de actuaciones, y en la que se van a investigar las presuntas “irregularidades denunciadas y vinculadas a la gestión” de Francisco Granados y sus colaboradores en relación con las empresas públicas Prisma, Arpegio y Fundación Arpegio 2.

A esta pieza se unirán las declaraciones prestadas y la prueba documental relativa a las citadas sociedades, así como al concierto Night of the Proms, celebrado en el Palacio de los Deportes de Madrid el 31 de marzo de 2007 y cuya promoción costó cerca de 140.000 euros, que sirvieron para compensar la “deficitaria” venta de entradas.

Al mismo tiempo, el juez Eloy Velasco acuerda abrir una pieza secreta basada en los hechos que ya se investigaban. Se trata de la pieza número 14, donde se encuentran como investigados el exconsejero de OHL Javier López Madrid y el exgerente del PP de Madrid Beltrán Gutiérrez Moliner. Esta pieza es la que trata de desentrañar si hubo financiación ilegal del Partido Popular en la Comunidad de Madrid y permanecerá secreta, al menos hasta el mes de junio.

En el auto se indica que se entregará a las partes personadas el próximo martes, 17 de mayo, en horario de audiencia, las grabaciones de las declaraciones judiciales a las que se hace referencia en el auto, entre ellas la de David Marjaliza, que respondió a las preguntas del magistrado durante 13 horas. Respecto a la documental, se señala que se entregará más adelante una vez verificado el foliado y escaneo de la misma.

La pieza que permanece secreta se nutre de las evidencias conseguidas en los registros ordenados el pasado mes de febrero por el juez Velasco. Uno de ellos se realizó en el despacho del exgerente del PP madrileño situado en la calle Génova, con el objeto de comprobar si la trama Púnica y este partido cometieron delitos de blanqueo de capitales y cohecho.

Los datos de una posible financiación irregular del PP figuraban en las anotaciones de Francisco Granados en una agenda en la que se asignaba el dinero de contratos “hinchados” por distintas administraciones a las cuentas del exnúmero dos de Esperanza Aguirre y al Partido Popular de Madrid.