Jorge Esparza, secretario de Organización de UPN, partido impulsor de esta ronda de contactos entre los partidos para cerrar un acuerdo, aseguró que se trata de un “fracaso en toda regla” por parte de las formaciones políticas por la incapacidad de acordar un pacto para la reducción de los gastos electorales. No obstante, comentó que sí hay voluntad por parte de los partidos políticos de hacer más austera esta próxima campaña electoral.

Según explicó el vicesecretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, PP, UPN, CDC, y PNV no querían reducir el límite de gasto electoral, mientras que PSOE, Podemos, ERC, IU, y C’s sí tenían la voluntad de bajar ese límite de gasto.

RECORTAR MAILING

El vicesecretario general de Organización y Electoral del Partido Popular (PP), Fernando Martínez-Maíllo, defendió que “se puede ser austero sin necesidad de llegar a un acuerdo”, aunque admitió que un pacto entre partidos para recortar el gasto de la próxima campaña era “deseado”.

“El PP va a ser austero por convicción y por responsabilidad y lo va a hacer desde ya”, aseveró el dirigente popular, que concretó que esa austeridad se va a traducir en una reducción del 30% del gasto electoral, en la eliminación de la publicidad exterior y también en el “compromiso” de reducir el ‘mailing’ por debajo de 0,18 céntimos, aunque sin concretar.

En este sentido, agregó que a partir de este momento “será la suma de responsabilidades de cada partido” lo que ayude a ahorrar y aseguró que la propuesta del PP era “muy razonable”, pero que no ha sido aceptada porque “algunos no querían gastar menos”.

El portavoz del PSOE en el Senado, Óscar López lamentó que no hay acuerdo pero dijo que cada uno tendrá que “predicar con el acuerdo” y, por eso, el PSOE cumplirá con una reducción del 30% respecto al 20-D (3 millones) más un millón de euros en el envío del ‘mailing’. En total, dijo, el PSOE ahorrará cuatro millones de euros respecto a la última campaña, un 50% respecto a la de 2011, y va suprimir "toda la publicidad exterior".

El dirigente socialista sostiene que es “posible” una rebaja del ‘mailing’ del 0,18 a 0,15 céntimos, lo que supondría un ahorro considerable próximo a los cinco millones.

Por su parte, el responsable de Finanzas de Podemos, Segundo González, lamentó que el PP no esté dispuesto a “competir” en igualdad de condiciones, es decir, a gastar el límite de tres millones de euros en la campaña que plantea la formación morada y que supondría un ahorro del 70%. También plantean realizar un ‘mailing’ conjunto, que se comprometen a realizar con los partidos que estén de acuerdo a llevarlo a cabo. “Esta propuesta se concretará en los próximos días”, dijo.

“No ha habido un acuerdo porque los partidos representados partían de enfoques diferentes”, explicó. “Tenemos partidos que en la anterior campaña han gastado 12 millones como el PP, 9 millones como el PSOE y quienes hemos gastado 2,2 millones”, insistió, para afirmar que Podemos no aumentará su gasto electoral.

Josep Vendrell, de En Comú Podem, pidió “generalizar” la austeridad en la próxima campaña electoral porque su formación ganó las elecciones en Cataluña con una campaña “austera y eficiente”. Recordó que desembolsaron 230.000 euros en las elecciones del 20 de diciembre.

El vicesecretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, destacó la “voluntad” de todos los partidos pese a la imposibilidad de llegar a un acuerdo “en mecanismos concretos” porque había “dos visiones” distintas entre los que apuestan por campañas austeras y los que vienen de "tradición de campañas gastando más". Ha sido, dijo, “imposible el acuerdo de esas realidades tan distintas”.

Pese a que no hay un “acuerdo global” Villegas se mostró “seguro de que esta campaña va a ser la más austera de la democracia en los últimos tiempos”. Si bien espera que esta austeridad no vaya en merma de la información a los ciudadanos”.

Avanzó que C’s hizo una “campaña austera” para el 20-D en la que gastaron “tres veces menos que el PP y, aproximadamente, la mitad que el PSOE, partidos con los que deberían “competir en igual de condiciones”.

Pese a ello, se comprometió a no gastar “más de lo que se gastó” el 20-D, y a intentar una reducción de gasto entre el 10-15% con gestos como la eliminación de la publicidad exterior.

NACIONALISTAS

El portavoz de PNV en el Congreso de los Diputados, Aitor Esteban, reconoció que el consenso era “difícil”, pero admitió que pensaba que se podía llegar a un acuerdo. “Ha faltado más cocina en todo esto más allá de las reuniones”, dijo.

Esteban lamentó que partían de “posiciones diferentes” porque unos tienen “más presencia en medios” y “los márgenes que quedan son muy diferentes y los costes fijos son iguales”, lamentó. Advirtió, a este respecto, de que partidos como el PNV tienen un “límite legal de gasto más pequeño” por ser un partido del ámbito vasco, “pero el coste es el mismo”.

“Siempre hemos sido un partido que ha mantenido el equilibrio financiero, estamos al día con Hacienda y los bancos”, defendió el portavoz parlamentario de PNV para asegurar que los partidos están “obligados” a gastar lo menos posible.

El portavoz adjunto del grupo de Democrácia i Llibertat (DiL), Carles Campuzano, por su parte, lamentó que los partidos han fracasado, ya que “se ha puesto de manifiesto que no se ha llegado a ningún tipo de acuerdo más allá de una reducción del gasto”, pero sin ser capaces de concretar.

Asimismo, comprometió que gastarán en la próxima campaña electoral un 30% menos del dinero que se destinó a esta partida en los anteriores comicios. Justificó este ahorro alegando que responde a “un clima de la ciudadanía que pide este esfuerzo de reducción”.

En este sentido, Campuzano hizo hincapié en que cuando haya una nueva legislatura habrá que abordar más a fondo los límites de gasto de las campañas electorales, aunque sin perder de vista que éstas “son una magnífica ocasión para dialogar y recoger ideas” y “que eso exige un esfuerzo económico”.

TRAJE DE AUSTERIDAD

Desde ERC, su portavoz en el Congreso, Joan Tardà, criticó que algunos partidos quieran presentarse ahora a las elecciones “con el traje de la austeridad”, cuando han sido incapaces de llegar a un acuerdo de gobierno en los cuatro meses que duró la anterior legislatura. Aprovechó para decir que el desacuerdo en cuanto al ahorro electoral demuestra que aquellos que han querido dar lecciones desde el 20 de diciembre, se encontrarán con un escenario similar tras el 26-J. “Lecciones pocas”, dijo Tardà.

También insistió en que apoyarán un gobierno progresista tras las nuevas elecciones, siempre y cuando se comprometan a autorizar un “referéndum a la escocesa” en Cataluña que tuviera lugar en el plazo de un año.

SIN SOBRES

Por su parte, el líder de Compromís Joan Baldoví dijo que bajarán el gasto de su campaña electoral con respecto a las elecciones del 20 de diciembre, cuando la formación valenciana gastó poco menos de 500.000 euros. Ante la falta de acuerdo sobre el reparto del ‘mailing’, pidió al menos tener en cuenta para las siguientes campañas eliminar los sobres del ‘mailing’, ya que “un millar de sobres” cuestan en torno a 50 euros, y los partidos mandan millones de sobres con las papeletas electorales

La diputada de Izquierda Unida-Unidad Popular Sol Sánchez remarcó que su formación ya eliminó la publicidad exterior en las pasadas elecciones del 20-D. Explicó que desde IU tienen un “compromiso real” con la austeridad y, aunque no se haya llegado a un acuerdo con respecto al ‘mailing’, dijo que quieren rebajar ese gasto, pero no saben cómo.

Esparza avanzó que UPN va a hacer una campaña “mucho más austera” y que, previsiblemente, esa reducción estará cerca del 30%. Pero apuntó que si se reduce el límite de gasto “no hay un ahorro real efectivo”, por lo que debe el ahorro debe ser sobre lo “gastado en diciembre”.

Lamentó que no hayan sido capaces los partido de llegar a un acuerdo “ni siquiera para esto”, por lo que reclamó que los partidos se comprometan a una “campaña más austera” que la del 20-D.