Extraer agua subterránea influye tres veces menos en la subida del mar de lo que se creía

MADRID
SERVIMEDIA

La extracción de agua del subsuelo para uso agrícola contribuye aproximadamente tres veces menos a la subida del nivel del mar de lo que se pensaba, según un nuevo estudio realizado por investigadores del Instituto Internacional para el Análisis de Sistemas Aplicados (IIASA), ubicado en Laxemburg (Austria).

El estudio, publicado en la revista ‘Nature Climate Change’, no cambia el panorama general de la futura subida prevista en el nivel del mar, sino que aporta una comprensión más exacta de las interacciones entre el agua subterránea, la atmósfera y los océanos, lo que podría ayudar a mejora las futuras predicciones de elevación del nivel marino.

“La proyección precisa del aumento del nivel del mar es importante, ya que éste es una amenaza para las personas que viven cerca de la costa y en islas pequeñas”, apunta Yoshihide Wada, director del estudio, quien añade que “algunas zonas bajas tendrán inundaciones más frecuentes y países de muy baja altitud podrían quedar sumergidas por completo”. “Esto también podría dañar la infraestructura costera sustancialmente”, apunta.

El nivel del mar ha aumentado 1,7 milímetros por año en el siglo XX y comienzos del XXI, una tendencia que se espera que continúe mientras el cambio climático caliente más la Tierra. Los investigadores atribuyen la elevación de los mares a una combinación de factores como el derretimiento de los casquetes polares y glaciares, la expansión térmica (el agua se expande cuando se calienta) y la extracción de aguas subterráneas para uso humano.

La contribución del agua del subsuelo es pequeña en comparación con la de la fusión del hielo y la expansión térmica, pero ha ido en aumento, lo que ha llevado a la preocupación de que este factor podría exacerbar el aumento del nivel del mar provocado por el calentamiento global, aunque sigue habiendo mucha incertidumbre sobre la variedad de fuentes que influyen al incremento del nivel marino.

0,12 MILILITROS AL AÑO

Algunos estudios previos, incluso cálculos utilizados en el Quinto Informe de Evaluación del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés), asumieron que casi el 100% del agua subterránea extraída terminó en los océanos. La investigación de la IIASA mejora esta estimación al tener en cuenta los efectos indirectos entre la tierra, el océano y la atmósfera, y baja este porcentaje al 80%, lo que significa que la brecha entre el aumento modelado y observado del nivel mar es más amplia, de manera que otros procesos contribuyen a este fenómeno de lo que se creía.

“Durante el siglo XX y principios del XXI, la contribución del agua subterránea acumulada al nivel global del mar se sobreestimó en al menos 10 mililitros”, dice Wada.

De hecho, el nuevo estudio muestra que la aportación del agua del subsuelo a la subida mundial del nivel del mar fue algo negativa entre 1971 y 2010. De 1993 a 2010, la investigación calcula en 0,12 mililitros por año la contribución de las aguas terrestres a la subida de los mares.

Este estudio no cambia el hecho de que las aguas terrestres contribuyan al futuro incremento del nivel mar a medida que aumenta su extracción. “El agua almacenada en el suelo puede ser comparada con el dinero en el banco. Si se retira el dinero a un ritmo más rápido de lo que se deposita, es muy probable que se empiece a tener problemas en la cuenta. Si utilizamos el agua subterránea de manera no sostenible, en el futuro puede que no haya suficiente para la producción de alimentos. Su agotamiento también puede causar graves problemas ambientales, como la reducción de agua en ríos y lagos, el deterioro de la calidad del agua, el aumento de los costes de bombeo y el hundimiento de la tierra”, explica Wada.

(SERVIMEDIA)
03 Mayo 2016
MGR/caa