Durante su intervención en el XXIII Encuentro del Sector Financiero organizado por Deloitte, la Sociedad de Tasación y ABC, Álvarez recordó que el banco se había fijado como objetivo alcanzar una rentabilidad sobre capital (ROTE) del 13% en el ejercicio 2018.

“El reto principal es mejorar la rentabilidad desde el 11% que tenemos y que es uno de los mejores de la industria”, afirmó Álvarez, tras señalar que pagar dividendo y acumular capital es un modelo de negocio “claro y definido y una ventaja significativa”.

En este sentido, el consejero delegado de Banco Santander puntualizó que es preciso trabajar sobre la vinculación del cliente y ofrecerle una propuesta de “valor”, lo que se traduce en una mejora de los ingresos para el banco y por tanto una mejora de la rentabilidad.

Álvarez se quejó de que en este momento muchas entidades están por debajo de la rentabilidad del coste de capital y eso “no es sostenible a largo plazo”. No obstante, reconoció que confía en que este año se ponga fin a la emisión de nueva regulación en el sector financiero.

CLIENTES DIGITALES

El consejero delegado del banco destacó que la entidad tiene un “objetivo claro” de número de clientes vinculados, que actualmente supera los 14 millones.

En este punto, el consejero delegado del banco reconoció que el proceso de digitalización al que se enfrenta la banca en este momento supone una inversión sin recoger beneficios a corto plazo, si bien es una “oportunidad” para vincular clientes.

Según el número dos de la entidad, en este momento Banco Santander está aumentando a un ritmo del 30% los clientes digitales vinculados, que se sitúa cerca de los 16 millones, con el objetivo de alcanzar los 30 millones a finales de 2018.