Una de ellas es una proposición de ley orgánica presentada por Esquerra Republicana sobre la derogación de la tauromaquia como patrimonio cultural, en la que se define a las corridas de toros como “espectáculos violentos donde, tras el supuesto ‘arte’ acrobático o coreográfico de picadores, banderilleros y toreros, se lleva a cabo la tortura de los animales con instrumentos de acero cortantes hasta su sangrante muerte, con la única finalidad de servir de diversión a los espectadores”.

Esa iniciativa, a la que tuvo acceso Servimedia, indica que “la tauromaquia tiene un importante enraizamiento histórico en la Península Ibérica”, pero añade que “eso no quita que sea una salvaje herencia ancestral”.

El grupo catalán señala que “la tortura no es cultura y, por tanto, la Administración General del Estado no puede considerar la tauromaquia un bien o patrimonio cultural”, por lo que reclama que se prohíban las ayudas o subvenciones públicas estatales a las corridas de toros, la cría de toros de lidia o la publicidad de espectáculos taurinos, y que el Gobierno excluya a los criadores de las ayudas de la Política Agraria Común de la UE.

Además, la proposición de ley orgánica apunta que “los poderes públicos velarán para que la tauromaquia no sea difundida entre los menores”, ante lo cual pide que las corridas de toros no se emitan en abierto en televisión, e insta a derogar la Ley para la regulación de la Tauromaquia como patrimonio cultural.

Por otro lado, Esquerra Republicana ha registrado cinco proposiciones no de ley para que sean debatidas y votadas en diferentes comisiones de la Cámara Baja, entre ellas una sobre la supresión de las subvenciones públicas a la tauromaquia (Comisión de Hacienda y Administraciones Públicas) y otra sobre la prohibición del maltrato y muerte del animal en las corridas de toros y demás actividades relacionadas con la tauromaquia (Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente).

El resto de proposiciones no de ley versan sobre la supresión de la categoría de trabajadores taurinos del régimen especial de jubilación anticipada por razón del grupo o actividad profesional (Empleo y Seguridad Social), la derogación de la tauromaquia como patrimonio cultural (Cultura) y la finalización de emisiones de corridas de toros en horario infantil (Control Parlamentario de la Corporación de RTVE y sus Sociedades).

TOROS SÍ

Por su parte, UPN ha registrado una proposición no de ley para que sea debatida y votada tanto en el Pleno del Congreso como en la Comisión de Cultura, relativa a la defensa de la tauromaquia.

En su iniciativa, recogida por Servimedia, la formación navarra insta al Gobierno a reiterar “el deber de los poderes públicos de protección, conservación y promoción de la tauromaquia como patrimonio cultural”.

Además, propone que el Ejecutivo ratifique “el deber de los poderes públicos de velar por la tutela del derecho de todos a su conocimiento, acceso y libre ejercicio en sus diferentes manifestaciones”; reconozca “el valor y la contribución social, cultural y económica de la tauromaquia en España”, y continúe con “el impulso de los trámites necesarios para la solicitud de la inclusión de la tauromaquia en la lista representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad”, auspiciada por la Unesco.

La iniciativa del UPN surge a raíz de la multitudinaria manifestación taurina celebrada en Valencia el pasado 13 de marzo y recuerda que en la pasada legislatura se aprobó la Ley para la regulación de la Tauromaquia como patrimonio cultural.

Además, lamenta que “algunos detractores de la fiesta de los toros recurren a un argumento que resulta especialmente ofensivo para los aficionados y amantes de la tauromaquia, y es considerarles a todos ellos como un colectivo que carecería de sensibilidad o de humanidad, tratando de trasladar al resto de la opinión pública la falsa imagen de que todos ellos fueran personas proclives a la violencia”.