ETA. La Fiscalía pide la entrega del presunto etarra detenido tras el tiroteo de París

MADRID
SERVIMEDIA

La Fiscalía requirió hoy a los jueces de la Audiencia Nacional que emitan las correspondientes órdenes de detención europeas para que las autoridades francesas entreguen a España al presunto etarra Joseba Fernández Aspurz, detenido este martes tras el tiroteo mantenido entre miembros de la banda terrorista y la policía francesa en las afueras de París en el que resultó mortalmente herido el gendarme Jean-Serge Nérin.

En concreto, el departamento dirigido por el fiscal jefe Javier Zaragoza ha pedido a los jueces de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska y Eloy Velasco que emitan las correspondientes órdenes de detención para que Fernández Aspurz responda ante la justicia española por las dos causas de “kale borroka” que tiene pendientes, según explicaron fuentes jurídicas.

El presunto etarra detenido ayer se encuentra en busca y captura desde el pasado 4 de marzo, cuando no se presentó al juicio que la Audiencia Nacional iba celebrar contra él y otros seis jóvenes por atacar con cócteles molotov a dos policía forales en Pamplona el 8 de marzo de 2009, víspera de las últimas elecciones generales.

La Sección Primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional puso en busca y captura a Fernández Aspurz y a Artzai Santesteban, quien tampoco compareció en la vista oral. El juicio siguió adelante con los otros acusados y ha desembocado en una condena a cuatro años y nueve meses de cárcel para tres de ellos, según la sentencia dictada hoy mismo.

Además, el detenido tiene otra causa pendiente, esta vez ante el juzgado de Eloy Velasco por su presunta participación en el ataque a dos sucursales bancarias perpetrado el 13 de septiembre de 2008 en Pamplona.

A pesar de la solicitud de la Fiscalía, es probable que las autoridades francesas no entreguen por el momento a Fernández Aspurz ya que podría ser acusado en el país galo de participar en el asesinato del gendarme.

Las fuentes fiscales consultadas destacaron la labor de las autoridades judiciales y policiales españolas a la hora de combatir la “kale borroka”, que constituye una “verdadera cantera” de ETA, tal y como demuestra el caso de Fernández Aspurz.

De los cerca de 650 presos que se encuentran en las cárceles españolas por ser miembros de ETA o de su entorno, en torno a 100 han sido condenados por actos de violencia callejera o por estar integrados en la organización ilegal Segi.

(SERVIMEDIA)
17 Mar 2010
DCD/lmb