Por ello, ha decidido impulsar la campaña ‘No alimentes al monstruo’, que busca prevenir a la población sobre esta práctica alertando de las consecuencias que tiene tanto para el medio ambiente como para las arcas públicas el vertido irresponsable de objetos por el inodoro.

URA recuerda que la red de saneamiento está pensada para llevar las aguas residuales para conducirlas a una depuradora, donde son tratadas y luego devueltas a ríos y costas sin causar daños al medio ambiente.

Sin embargo, cuando estas aguas van acompañadas de toallitas higiénicas u otros objetos como pañales, aceites o comida se producen estancamientos que suponen un importante sobrecoste del servicio. De hecho, en País Vasco -donde se ha impulsado la campaña- más de 2.400 millones de toallitas higiénicas son arrojadas por los retretes, provocando graves atascos que afectan a los ríos.

Aunque en el etiquetado de muchas de estas toallitas se indica que se pueden verter por el inodoro, lo cierto es que no se especifica cuánto tardan éstas en disolverse, según denunció la Agencia Vasca del Agua.

La campaña, que ha sido presentada este viernes, está impulsada tanto por URA como por los consorcios y mancomunidades de aguas de las tres provincias, y coordinada por Aclima.