García-Legaz, en la presentación de los datos de balanza comercial correspondientes al mes de diciembre, del cuarto trimestre y el conjunto del año 2015, apuntó que el escenario económico mundial ha registrado tasas de empeoramiento en los últimos meses y semanas, “por lo que se convierte en una variable a tener en cuenta” de cara al año 2016 a la hora de valorar el comercio exterior español.

“Si la tasa de crecimiento del PIB mundial baja, por debajo incluso de la tasa de crecimiento de la economía española, impactará también en el sector exportador español”, añadió el secretario de Estado de Comercio.

García-Legaz apuntó que las variables estructurales de la economía española “son fuertes y tenemos un sector español exportador con mucho músculo”. Por tanto, aseguró que confía en el tejido productivo y la capacidad exportadora.

El secretario de Estado de Comercio reconoció que ha habido unos años en los que se ha producido una moderación salarial, lo que “ha ayudado a la competitividad” y añadió que sin este escenario “no hubiésemos sido capaces de conseguir las ganancias de competitividad que España ha conseguido”.

“La moderación salarial no gusta a nadie pero es algo que se tenía que producir para recuperar competitividad y lo cierto es que ha ayudado”, explicó el secretario de Estado de Comercio.

García-Legaz aseguró que hay otros factores a la hora de explicar la recuperación de la competitividad como los “balances de ganancias de productividad, las ganancias en factores como innovación y calidad o el componente tecnológico”.

Ante la caída en la exportación hacia países emergentes en 2015, el responsable afirmó que “nuestro sector está buscando alternativas con mucho éxito” en países como Filipinas, Japón o Australia.

Tras el anuncio de Pablo Iglesias de aumentar el impuesto de sociedades hasta el 30%, García-Legaz comentó que la decisión de bajarlo fue una “muy buena decisión, ya que ha aumentado la inversión extranjera”.

Respecto al total de las importaciones energéticas y la caída del precio del barril de Brent, indicó que España importa un 78% petróleo y un 19% de gas, lo que significa que en términos de factura neta “nuestra factura se abarata cuando se produce una caída de los precios del petróleo”. Por tanto, el impacto para la economía “ha sido positivo”.

Por último, el secretario de Estado de Comercio afirmó que España ha perdido casi 5.000 millones en exportaciones de refino y casi 1.800 millones de euros en exportación de gas durante 2015.