ONG de infancia exigen a los políticos un plan urgente para proteger a los niños refugiados

MADRID
SERVIMEDIA

Organizaciones de defensa de los derechos de la infancia exigieron este miércoles un 'Plan europeo de protección para los niños no acompañados o separados de sus familias', que articule “medidas concretas y urgentes” para atender a los refugiados que llegan a Europa, en especial a los menores no acompañados.

Según denunciaron las ONG durante la presentación del plan en el Congreso de los Diputados, cada vez hay más niños en esa situación, ya que han pasado de ser uno de cada diez a uno de cada tres.

Estas organizaciones mostraron especial preocupación por los menores no acompañados, ya que son los más vulnerables ante las mafias de explotación sexual y laboral.

Ricardo Ibarra, director de la Plataforma de Infancia, entidad que aglutina a 50 ONG de menores en España, insistió en que “la Unión Europea debe dar una respuesta inmediata y urgente ante esta situación” y enumeró diez situaciones que se deben abordar en esa respuesta en torno a los niños no acompañados, como su identificación y seguimiento, la lucha contra la trata, el intercambio de información sobre los niños que viajan solos entre países, proteger su salud y tener en cuenta la opinión de los menores al tomar medidas y no detenerlos.

Ibarra estuvo acompañado por Amelie Gauthier, responsable de Incidencia de Plan España; Patricia Moreira, directora de Ayuda en Acción; Andrés Conde, director general de Save the Children; Javier Martos, director Ejecutivo de Unicef Comité Español; José M. Faura, director general de Educo, y Charo Izquierdo, coordinadora de Proyecto de Desarrollo y Sensibilización de World Vision Internacional.

SOLUCIÓN INTERNACIONAL

Martos destacó que, aunque se habla de una “posible” tregua en Siria, “hay que parar esta guerra”, de la que casi se cumplen seis años, y se debe hacer “no sólo con ayuda humanitaria, sino con una solución internacional”.

Desde Unicef se alertó de que la llegada de menores a países como Turquía puede conllevar nuevas “situaciones de violencia”, porque están empezando a competir en el mercado de trabajo local.

Andrés Conde también alertó de que, ante el incumplimiento de los compromisos de Europa para reasentar a 160.000 refugiados desde Grecia y Hungría (se han reubicado menos de 400), “el flujo no va a parar, tanto por la violencia como por la situación económica que viven las familias de refugiados”, y añadió que quienes están en los países limítrofes a Siria están saliendo hacia Europa porque se están quedando sin recursos.

La portavoz de Plan Internacional puso el acento en las niñas, porque están “más expuestas a sufrir violencia”, e instó a los políticos españoles y europeos a tenerlas en cuenta en el citado plan de protección.

Desde Educo, José M. Faura recordó que España apenas ha recibido una veintena de refugiados, pese a que se comprometió a recibir tantos como Canadá, país que ha dado cobijo ya a 18.000. Por ello, insistió en que en España ha habido “mucha gente que se ha puesto a disposición”, mano que también ha tendido la Iglesia católica.

Patricia Moreira, de Ayuda en Acción, se sumó a esa petición diciendo que la sociedad española “quiere ayudar” y que las organizaciones de la sociedad civil también lo están. “Parece absurdo que con estas voluntades tan explícitas no seamos capaces de dar los pasos necesarios”, aseveró.

CUESTIÓN LEGAL

Charo Izquierdo, de World Vision, calificó de “insignificante” y “vergonzoso” el número de inmigrantes que España aceptó recibir, cuando en países como El Líbano, a una población de 4,3 millones se suma 1,5 millones de refugiados; es decir, el 25%. “Tenemos que hacer un esfuerzo, no sólo es cuestión de humanidad, sino que es cuestión legal”, dijo.

Por todo ello, Ibarra recordó que el Comité de los Derechos del Niño “va a vigilar a España”, que tendrá que presentar un informe sobre la aplicación de la convención. “Estamos claramente incumpliendo esos compromisos”, manifestó.

(SERVIMEDIA)
17 Feb 2016
AHP/caa