De esta manera, la inflación retoma la senda negativa tras la estabilidad de precios del pasado mes de diciembre.

El grupo con mayor influencia en este descenso fue vivienda, con una caída del 6%, causada, fundamentalmente, por la disminución de los precios de la electricidad, frente a la subida registrada en enero de 2015.

En el caso de los transportes, se registró un aumento de su tasa anual de casi un punto, hasta el -1,9%, debido, en su mayoría, a que este mes los precios de los carburantes y lubricantes han bajado menos de lo que lo hicieron en enero de 2015.

Además, en alimentos y bebidas no alcohólicas los precios subieron un 2,1% y en hoteles, cafés y restaurantes lo hicieron un 1,3%.

Los datos por regiones muestran que las mayores caídas de precios en enero se localizaron en Melilla y Canarias (ambas con un -0,7%), seguidas de Extremadura, Castilla-La Mancha y Castilla y León (las tres con un -0,6%). Sólo País Vasco registró una tasa positiva de inflación en enero (+0,1%).

Por su parte, la tasa de variación anual de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) se mantuvo en el 0,9%, y se sitúa más de un punto por encima de la del IPC general.

Mientras, en enero la tasa de variación mensual del IPC general fue del -1,9%. Entre los grupos con repercusión negativa cabe destacar vestido y calzado, con una tasa del -15,3%, que recoge el efecto de las rebajas de invierno.

En el mes de enero la tasa de variación anual del IPC Armonizado se situó en el -0,4%, tres décimas por debajo de la registrada el mes anterior (-0,1%). La variación mensual del IPC Armonizado fue del -2,5%.

En el mes de enero la tasa de variación anual del IPC a Impuestos Constantes (IPC-IC) se situó en el -0,3%, igual que la registrada por el IPC general. En este caso, la tasa de variación mensual fue del -1,9%.