Fisioterapeutas madrileños forman a personal sanitario en África gracias al Colegio Profesional de Fisioterapeutas

- La institución colegial concedió dos becas de cooperación en 2015 para sufragar gastos

MADRID
SERVIMEDIA

Los fisioterapeutas madrileños Álvaro Cuñado y Nerea Roldán han trabajado voluntariamente formando a personal sanitario en el Hospital Comunitario de Alinafe, de Malawi, y en el Hospital de Saint Jean de Dieu de Thiès, de Senegal, gracias a las becas de cooperación que el Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid concedió en 2015.

Gracias a la ayuda del Cpfcm, que sufragó sus gastos de desplazamiento, Cuñado estuvo tres meses colaborando como fisioterapeuta con la ONG África Directo en dos proyectos, uno en el hospital de Malawi citado y otro en el Centro de Salud de Mtendere.

En ambos casos su trabajo consistió tanto en formar a los 'asistentes de fisioterapia' locales (enfermeros, nutricionistas, encargados de los huérfanos, técnicos del VIH etc.) como en ofrecer asistencia en fisioterapia a los pacientes que lo precisaban, llegando a tratar a unas 200 personas que se desplazaban desde un radio de unos 30 kilómetros para recibir tratamiento.

Pero además de aportar, Cuñado aseguró a través de un comunicado haber vivido una experiencia muy enriquecedora a nivel profesional, ya que su estancia allí le permitió tratar afecciones que no se dan en España, como patologías post-malaria con afectaciones del sistema nervioso central (retraso motor, diplejias, hemiplejias…), deformidades del sistema musculo-esquelético o patologías originados por ataques de la fauna local, entre otras.

Para este fisioterapeuta, el apoyo del Cpfcm a los proyectos de cooperación es “importantísimo”, ya que en definitiva “supone llevar la fisioterapia a lugares de nuestro planeta donde la población la necesita mucho más que en los países desarrollados”.

Por su parte, Nerea Roldán colaboró durante los meses de marzo y noviembre en dos proyectos de cooperación en Senegal, uno en el hospital Saint Jean de Dieu de Thiès, una ciudad del interior, y otro en una maternidad rural en la aldea de Beer.

Durante sus estancias, Roldán formó a 30 matronas y a un fisioterapeuta en técnicas de preparación física en el embarazo, de mejora en los partos y de recuperación de secuelas post-parto. Además, trató a más de 60 mujeres con distintas secuelas obstétricas y patologías uro-ginecológica.

La fisioterapeuta, que estuvo trabajando en estos proyectos durante cinco años antes de poder ejecutarlos, explicó que su realización le ha supuesto mucha satisfacción tanto a nivel personal como profesional, y recomienda vivir este tipo de experiencias, ya que “es la mejor manera de sentir la profesión y de sacar lo mejor de ti”.

“Por desgracia, en los países en vías de desarrollo hay muy pocos fisioterapeutas y la fisioterapia especializada no existe, por lo que hay que asumir un compromiso por parte de todos, colegio y colegiados, para hacer llegar este conocimiento al resto del mundo”, aseguró.

En este sentido, Roldán valoró muy positivamente la implicación del Cpfcm, ya que “su apoyo hace que los proyectos de cooperación salgan hacia delante y facilita mucho a los voluntarios el poder colaborar”.

(SERVIMEDIA)
08 Feb 2016
SRH/caa