Según informó el Ministerio de Asuntos Exteriores, “no hay solución militar” en este conflicto, por lo que es “urgentísimo” avanzar hacia una “solución política negociada” bajo los parámetros de la declaración de Ginebra de 2012 y de la Resolución 2254 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

A su vez, España celebró la decisión del Alto Comité para las Negociaciones de la oposición siria de participar en el proceso, al tiempo que mostró su apoyo “sin reservas” a la labor desarrollada por el enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura.

En ese sentido, el Ejecutivo instó a las partes a participar en las negociaciones “de buena fe y con espíritu constructivo”, ya que “es esencial que todos cumplan estrictamente y sin dilación” las obligaciones de carácter humanitario recogidas en la Resolución 2254 del Consejo de Seguridad de la ONU.

Por ello, el Gobierno español condenó “categóricamente” el atentado terrorista perpetrado ayer en las inmediaciones del santuario de Seida Zeinab, en Damasco, “por las decenas de víctimas mortales que ha causado y por ser un ataque contra las mismas conversaciones de paz”.