Irán ejecutó a más de 830 presos en 2015, la mayoría por delitos de drogas

- Según Human Rights Watch

MADRID
SERVIMEDIA

Más de 830 detenidos fueron ejecutados en Irán en 2015, la mayoría de ellos por delitos vinculados con las drogas, lo que supone un “drástico incremento” respecto de años anteriores, según señaló este miércoles Human Rights Watch (HRW) en su ‘Informe mundial 2016’.

El informe sentencia que “las fuerzas de seguridad y de inteligencia fueron las principales responsables de violaciones de derechos humanos” en Irán durante el año pasado y que las autoridades “avasallaron reiteradamente” la libertad de expresión y “acallaron el disenso”.

Así, usuarios de medios sociales, artistas y periodistas, como el reportero de ‘The Washington Post’ Jason Rezaian, de nacionalidad iraní-estadounidense, se enfrentaron a severas penas por “cargos poco plausibles” relacionados con seguridad.

Además, HRW indica que la libertad de reunión y asociación también se vio menoscabada el año pasdado, y las autoridades hostigaron y detuvieron a estudiantes, docentes y sindicalistas por actividades pacíficas. De hecho, añade que “decenas de activistas políticos y defensores de derechos humanos están detenidos por sus actividades pacíficas o profesionales”.

“Un año tras otro, las fuerzas de seguridad reprimen libertades fundamentales y cometen abusos impunemente en Irán”, manifestó Sarah Leah Whitson, directora para Oriente Medio de HRW, quien recalcó que “hace ya tiempo que las autoridades deberían haber exigido que los responsables de violaciones de derechos humanos rindieran cuentas por haber transgredido las obligaciones de derechos humanos asumidas por Irán a nivel interno e internacional”.

Por otro lado, el informe apunta que las mujeres en Irán “sufren discriminación en múltiples aspectos de sus vidas”, entre ellos los reslacionados con el estado civil, como el matrimonio, el divorcio y los derechos hereditarios.

Además, HRW destaca que las autoridades intentaron adoptar el año pasado leyes discriminatorias que limitarían la posibilidad de empleo de las mujeres en determinados sectores, así como su acceso a la planificación familiar.

Por último, el informe recoge que entre 2,5 y 3 millones de refugiados y trabajadores migrantes afganos en Irán se enfrentan a obstáculos para acceder a los servicios sociales, tienen mayores probabilidades que la población general de ser interrogados arbitrariamente y, en ocasiones, detenidos por las autoridades.

(SERVIMEDIA)
27 Ene 2016
MGR