El Plan de Estudios del Grado en Farmacia de la Universidad Complutense requiere a los estudiantes de quinto curso la realización, con carácter obligatorio, de estas prácticas durante tres meses en oficinas de farmacia y durante otros tres en los servicios de farmacia de centros hospitalarios.

El convenio de colaboración suscrito hoy establece que será la UCM, a través de su Facultad de Farmacia, quien se responsabilice académicamente de las prácticas que se lleven a cabo en las oficinas de farmacia acreditadas a tal efecto. Concretamente establecerá los criterios para la acreditación de las oficinas de farmacia colaboradoras en el programa de prácticas y velará para que los tutores de las prácticas sean farmacéuticos colegiados que recibirán el nombramiento honorífico de “colaborador en docencia práctica”.

El Convenio hace especial hincapié en el respeto a la igualdad de todos los estudiantes y su no discriminación en el acceso a las prácticas, con independencia de su origen racial o étnico, sexo, religión, convicción u opinión, edad, discapacidad, nacionalidad, enfermedad y cualquier otra condición o circunstancia, tanto personal, como social, explica la UCM en un comunicado.

Para la adecuada supervisión y aplicación de este Convenio se constituye la Comisión Mixta de Seguimiento que coordinará y velará por el recto cumplimiento de los programas de prácticas desde su inicio hasta su finalización. Para ello la Comisión deberá analizar las valoraciones ofrecidas por los alumnos en los cuestionarios que realicen al término de su módulo formativo. Estará compuesta por cuatro miembros: dos de la Universidad Complutense y dos del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid.