Según informó hoy Unicef, en los próximos meses pondrá el foco de atención en los niños de Siria más afectados, como los desplazados internos, los refugiados y los que viven en zonas aisladas o en asentamientos informales.

Dentro de Siria pretende llegar a más de un millón de niños a los que proporcionara ropa, mantas y calefactores. Además, repartirá bonos de dinero en efectivo para que las familias puedan comprar lo que necesiten para el invierno, como abrigos y bufandas. Esta campaña se suma a los programas que sigue llevando a cabo en materias como la salud, la educación, el agua y el saneamiento y protección.

“Estos meses son especialmente brutales para los niños”, afirmó Peter Salama, director regional de Unicef para Oriente Medio y África del Norte. “Tienen un mayor riesgo de desarrollar infecciones respiratorias debido al frío y están en peligro cuando las familias queman plástico u otros materiales tóxicos en el interior de sus refugios para mantenerse calientes”.

Por último, desde Unicef señalaron que el conflicto ha causado el desplazamiento en el interior de Siria de más de 3 millones de niños, de los cuales algunos de ellos se han visto obligados a desplazarse en más de una ocasión. En total, más de 2,2 millones de niños viven como refugiados en los países vecinos: Turquía, Líbano, Jordania, Iraq y Egipto.