Madrid. Un segundo trabajador de Jigar se sube esta madrugada a la grúa en Pozuelo de Alarcón

- Doney logró burlar la seguridad que hay en torno a la grúa hacia las cinco de la mañana

MADRID
SERVIMEDIA

Doney, un segundo trabajador de la empresa Estructura Jigar ha conseguido a las cinco de la mañana subirse a la grúa a la que está encaramado desde hace más de tres semanas su compañero, Sandy, en Pozuelo de Alarcón, burlando la seguridad que había en torno a la grúa.

Varios trabajadores de Jigar, una empresa familiar dedicada al encoframiento que fue contratada por la compañía Ploder para hacer unas obras en la Plaza del Padre Vallet encargadas por el Ayuntamiento de la localidad, decidieron subirse a la grúa para protestar por los 140.000 euros que Ploder debe a Jigar.

El primero en subirse, el 1 de febrero, fue David Cediel, que bajó de la grúa el pasado día 17 ante el inminente nacimiento de su segundo hijo. A él le acompañó a partir del día 6 de febrero Sandy, que ha estado solo a 40 metros de altura desde el pasado día 17, pero que desde hoy ya tiene la compañía de Doney.

Sandy declaró este miércoles a Servimedia que está "muy contento" porque haya subido su compañero, ya que llevaba unos días un poco desanimado. "Sobre todo porque me llama mi mujer y hablo con la niña y me dice que me echa de menos y empieza a a llorar, y yo estaba bajo de moral", explicó.

Según Sandy, que tiene dos hijas, una de 4 y otra de 7 años, es "muy duro" estar allí arriba. "Yo llevo ya aquí 25 ó 26 días y estoy muy cansado. Se pasa fatal, sobre todo cuando se mueve la grúa", aunque reconoció que mantiene el tipo y dice que se encuentra bien por los vecinos que van todos los días a concentrarse para que no se preocupen.

Sandy indicó que están esperando indicaciones de su jefe para ver si bajan hoy o continúan subidos a la grúa, porque "podría haber alguna solución por ahí abajo. No sé qué estarán intentando", manifestó.

(SERVIMEDIA)
03 Mar 2010
NLV/lmb