Sánchez expuso sus propuestas sobre política internacional en un acto en el que participó también el expresidente del Gobierno Felipe González y que contó con la presencia del ex secretario general del PSOE Joaquín Almunia, de los exministros Miguel Ángel Moratinos y Trinidad Jiménez, y también de Javier Solana, entre otros.

Alertó de la necesidad de definir una estrategia común europea y en función de ella “las capacidades militares que tiene cada cual” para llevarla a cabo sin olvidar que esa lucha requiere sobre todo “inteligencia, o contrainteligencia”, por lo que cree necesario una mayor integración, “al menos cooperación reforzada” entre los servicios de inteligencia.

Destacó que la principal comunidad afectada por ese terrorismo es la árabe musulmana, por lo que es “fundamental” incorporar a la Liga Árabe a la respuesta política y “sobre el terreno”.

En un plano más general, Pedro Sánchez aseguró que España “tiene que salir del ensimismamiento en el que hemos vivido estos cuatro años” y recuperar su “voz propia” en la política europea. En el caso de los atentados en París, aseguró que España no se puede limitar a “esperar a ver” qué pide Francia.

En ese contexto, denunció que en ocasiones el Gobierno “se ha parapetado, se ha escondido” detrás de las instituciones europeas “para no mojarse” y no posicionarse en la propuesta de medidas.

Sánchez aseguró que en materia exterior ha sido una legislatura “para olvidar” por la falta de consenso en leyes fundamentales, las oportunidades perdidas y el retroceso en posiciones que se habían ganado, por ejemplo en cooperación.

Alertó también de que la crisis de refugiados obliga a Europa a definir una respuesta “sostenida en el medio y el largo plazo”, y puso también el acento en la atención a los españoles en el exterior y en el combate al cambio climático.