En rueda de prensa, Garzón explicó que nadie del Gobierno ha pedido a Izquierda Unida que se sume al Pacto contra el terrorismo yihadista firmado por PP y PSOE y al que se va a adherir Ciudadanos. Las conversaciones posteriores a los atentados de París, precisó, se han basado en la información sobre la situación, dentro de la normalidad de los contactos con las fuerzas parlamentarias.

Izquierda Unida es partidaria de debatir sobre ese asunto en la campaña electoral porque forma parte de los cometidos del Gobierno que tendrán que elegir los ciudadanos, pero quiere que sea un debate “sereno y frío” sobre las causas del terrorismo. Rechaza sumarse a un acuerdo “preestablecido” que solo pretende mantener la línea “errónea” definida en su día por Estados Unidos y que solo ha servido para alimentar la violencia.

La posición es “absolutamente firme”, aseguró Garzón, y se mantiene en las coordenadas “inteligentes, razonables y serias” de preguntarse, por ejemplo, qué crearán quienes bombardean a Isis, si crearon esa fuerza para luchar contra Al Qaeda.

Izquierda Unida estará en la manifestación del próximo sábado en coherencia con el “no a la guerra” que defiende desde 2003, aunque no estará Alberto Garzón, que tiene actos previstos en Andalucía.