En la inauguración de una jornada sobre el Día Mundial del Retrete organizada en Madrid por la Fundación We Are Water, Ardiles defendió que “en todos los países se pueda disfrutar de algo para nosotros tan obvio como poder abrir el grifo cada mañana y disponer de agua potable o contar con unos sistema de saneamientos accesibles y asequibles”.

Ardiles destacó que el Gobierno ha redoblado en los últimos años su trabajo de cooperación internacional para avanzar en la realización efectiva del derecho humano de acceso universal al agua y al saneamiento, porque “asegurar el acceso al agua y al saneamiento es una cuestión de dignidad y de defensa de los derechos humanos”.

Señaló que España ha sumado sus esfuerzos a los de la comunidad internacional para cumplir los Objetivos de Desarrollo del Milenio. Un ejemplo de ello es el Fondo de Cooperación de Agua y Saneamiento para América Latina, en el que el Gobierno ha invertido más de 800 millones de euros para poblaciones vulnerables desde 2008.

“España sigue sumando nuestros esfuerzos renovados a los de la ONU para conseguir hacer realidad el reto recogido en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de lograr que en 2030 esté garantizado el acceso equitativo a los servicios de saneamiento e higiene adecuados para todos, prestando especial atención a las necesidades de las mujeres y las niñas, dos de los colectivos más vulnerables por esta ausencia”, resaltó.

Ardiles recalcó que España ha defendido el reconocimiento de un Objetivo de Desarrollo Sostenible dedicado en exclusiva al acceso al agua y al saneamiento porque, aunque se trata de un objetivo transversal, porque “sólo mediante su reconocimiento como un objetivo individualizado será posible llevar el agua y el saneamiento a lo más alto de la agenda internacional, máxime en este contexto de adaptación al cambio climático”.