Para ello, el arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, pidió ayuda este jueves a un centenar de alumnos en la Facultad de Derecho de la Universidad Complutense de Madrid, en un encuentro organizado por la Pastoral Universitaria.

“Dios me da la oportunidad de hacer un sueño que tenía, una casa para formar como en un seminario a las familias”, comentó Osoro. “La familia es una cosa muy seria”, añadió, y llamó a “preparar” a los jóvenes con vocación matrimonial especialmente “cuando el ambiente cultural” no es propicio a los cristianos y “hay situaciones muy diferentes”.

Este anuncio se produce pocos días después del informe del Instituto de Política Familiar (IPF) difundido esta semana, que afirma que en España se registran siete rupturas por cada diez matrimonios, por lo que cada cinco minutos acaba una unión. Desde 1981, año en el que se aprobó la Ley del Divorcio, se han producido casi tres millones de rupturas.

En concreto, el informe del IPF alerta de que 2014 se produjeron 168.556 matrimonios y 110.764 rupturas familiares, lo que supone que, por cada 10 matrimonios que se celebraron en un año, se rompieron siete.

LA CIUDAD DE LA ESPERANZA

Este 'seminario' para parejas se suma a otros dos proyectos en los que trabaja el Arzobispado de Madrid en la actualidad. El segundo es la creación de una ‘Ciudad de la Esperanza’, que el arzobispo anunció el pasado junio en una entrevista a Servimedia.

La Iglesia madrileña ya ultima la documentación pertinente para recibir un terreno “impresionante” en una localidad del noroeste de Madrid, en las inmediaciones de la carretera de la Coruña, donde construirá la 'Ciudad de la Esperanza'. En su mensaje a los universitarios, el arzobispo pidió ayuda a los jóvenes porque “hay que construirla” y poner “ladrillo a ladrillo”.

Este proyecto seguirá los pasos del que impulsó cuando fue arzobispo de Valencia, con el objetivo de cubrir las necesidades básicas y ayudar a fraguarse un futuro a personas desarraigadas y en situación de vulnerabilidad.

Osoro tiene especial interés en la reinserción social de los jóvenes presos que según él suponen el 90% de los internos de las cárceles. “Son chavales jóvenes, sin trabajo, sin familia. Cuando salen, ¿dónde van? A la mínima otra vez acaban en la cárcel”, subrayó.

Por eso, considera que crear la 'Ciudad de la Esperanza' “es crear futuro, inclusión y encuentro”. “También trabajará el arzobispo. Algún ladrillo cogeré”, bromeó.

NUEVO SISTEMA EDUCATIVO

El tercer proyecto -“precioso”, según Osoro- es encargo directo del Papa Francisco y tratará de mejorar el sistema educativo. Se trata de las 'Escuelas Ocurrentes' que ya funcionan en Argentina y en las que colaboran colegios “de todos los estilos y creencias” para “provocar” un nuevo sistema educativo a nivel mundial.

“Hay que hacerlo porque el que hasta ahora tenemos parece que va al descarte” y porque, en su opinión, “los jóvenes y los niños son los que más capacidad tienen para cambiar este mundo”. “Tienen el colmillo menos retorcido”, indicó.