Sánchez se marca como prioridad conseguir un Estado laico
- Dice que las medidas que propone "no van contra nadie"
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El secretario general del PSOE y candidato a la Presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, está convencido de poder lograr la laicidad del Estado y para ello impulsará una ley de libertades religiosas en la que se garantice el culto pero se reafirme la laicidad del Estado y de sus instituciones.
En una entrevista en TVE recogida por Servimedia, Sánchez afirmó que en la agenda de los gobiernos socialistas durante los últimos 20 años ha habido prioridades políticas, como el fin de la violencia terrorista -de la que hoy se cumplen cuatro años-, pero consideró que ahora “la prioridad política de mi generación, entre otras, será reformar el Estado y convertirlo en un Estado laico”.
“Eso no significa ir contra la religión; yo no soy ningún radical que ponga en cuestión la creencia de nadie. Pero, desde el punto de vista liberal, la religión es algo que afecta a uno mismo y, en consecuencia, el Estado lo que debe garantizar es la laicidad en su sistema educativo, en ceremonias institucionales que tiene, y circunscribir al ámbito privado el ejercicio de sus creencias religiosas”, aclaró el líder socialista.
En este sentido, confirmó que, si gobierna, denunciará el Concordato firmado entre España y el Vaticano y el Ejecutivo que presida aprobará una ley de libertad religiosa, porque considera que “el Estado tiene la capacidad de poder garantizar el hecho religioso, que cada cual pueda ejercer libremente sus creencias, pero que el Estado debe ser laico para garantizar que representa a todos”.
“Es importante ser respetuosos con la creencia de cada cual, pero también creo que es importante que el país avance hacia la laicidad del Estado y de sus instituciones”, agregó.
NINGUNA AFRENTA
Sánchez insistió en que las medidas que propone “en absoluto” deben ser entendidas por la Iglesia como una afrenta, porque los socialistas van a “plantear una ley de libertad religiosa y garantizar el hechos religioso por ley. No va contra nadie, sino en favor de avanzar en un Estado laico como son otros Estados europeos”, concluyó.
En este sentido, Sánchez señaló que para los socialistas, la Ley de Calidad Educativa, Lomce, aprobada por el Gobierno del PP, supone un “paso a atrás” al considerar la Religión como asignatura evaluable. A su juicio, "es más importante que la Religión se pueda dar en el centro fuera del horario escolar, y que en el horario escolar lo que haya sean asignaturas como Educación para la Ciudadanía, educación que instruye en valores constitucionales”.
ACUERDO EDUCATIVO
En esa línea, reiteró su compromiso de derogar la Lomce y apostó por un “nuevo acuerdo educativo", hasta el punto de reconocer que le gustaría "ser recordado” como el presidente que logró alcanzar “un marco educativo estable que garantice la igualdad de oportunidades y que sea excelente".
Una vez más, defendió la "universalización de la educación" hasta los 18 años y "convertir las becas en un derecho", porque en España “hay familias que están obligando a sus hijos a tener que abandonar sus estudios por la imposibilidad de poder acceder a unos estudios universitarios”.
Preguntado por los recursos económicos que requerirán estas medidas, Sánchez se comprometió a “buscar hasta debajo de las piedras” todos los recursos necesarios, al tiempo que se mostró convencido de que "hay margen para hacer cosas” y “tener un sistema educativo equiparable” a lo que hay en otros países de Europa.
(SERVIMEDIA)
20 Oct 2015
MML/caa