El convenio de colaboración fue ratificado este jueves por el consejero de Territorio, Energía y Movilidad del Gobierno de las islas, Juan Boned, y el director de Responsabilidad Social Corporativa de Sareb, Gaspar González-Palenzuela.

El documento firmado establece que la Administración autonómica gestionará durante cuatro años los inmuebles cedidos. La renta exigida a los inquilinos no superará el 30% de sus ingresos.

La Sareb y el Gobierno de Baleares se han comprometido a realizar los trabajos necesarios para asegurar las condiciones de habitabilidad de la vivienda. Además, la Sareb percibirá del Gobierno insular una retribución mensual para pagar el seguro de daños y responsabilidad civil, los gastos de comunidad y los impuestos municipales.

El Instituto Balear de la Vivienda (Ibavi) se encargará de la obtención del certificado de eficiencia energética, en caso de que alguno de los activos cedidos no lo tuviera. También satisfará los gastos de mantenimiento ordinario de la vivienda o de las reparaciones ordinarias y asistencia técnica al arrendatario, así como los gastos propios de gestión y administración de los alquileres, entre otros. Asimismo, la Administración regional seleccionará a los usuarios y firmará con ellos el contrato de arrendamiento.

El presidente de Sareb, Jaime Echegoyen, explicó que “el presente acuerdo nos permite avanzar en la cooperación con los gobiernos regionales para ayudar a las familias que tienen dificultades de acceso a una vivienda”. "En estos momentos la compañía mantiene contactos con otras comunidades autónomas con las que espera cerrar nuevos acuerdos próximamente”.