Todavía hay 62 millones de niñas que no van al colegio

- La ONU llama a trabajar más por los derechos de las adolescentes

MADRID
SERVIMEDIA

En 2015 hay 62 millones de niñas que no van al colegio, 39.000 que son forzadas a casarse cada día y 140 millones de niñas y mujeres que han sufrido mutilación genital femenina.

Estos datos los recuerda la directora general de Plan Internacional España, Concha López, una organización que trabaja por los derechos de la infancia y que pide a gobiernos e instituciones, tanto nacionales como internacionales, “ceder los espacios necesarios para que las niñas alcen la voz y participen en la toma de decisiones que afectan su vida y su futuro”.

Y los recuerda en el marco del Día Internacional de la Niña, que se celebra este 11 de octubre, fecha en la que once ciudades españolas se visten de rosa para hacer visible la vulneración de los derechos de las niñas. Al caer la noche, junto al Palacio de Cibeles de Madrid, se iluminarán de forma simultánea el Palacio de la Magdalena en Santander, la Muralla de Ávila, el Acueducto de Segovia, la Torre de Hércules y la Fuente de Cuatro Caminos en A Coruña, las Casas Colgadas de Cuenca, la Alhambra de Granada, el Templo de Diana en Mérida, el edificio del Ayuntamiento de Tarragona, el Teatro Campos Elíseos en Bilbao y el Ayuntamiento de Valencia.

Además, ciudades de todo el mundo iluminarán sus edificios más emblemáticos de rosa para apoyar los derechos de las niñas, como el Empire State Building en Nueva York, las cataratas del Niagara en Ontario, el City Hall en Copenhague y la Torre de Calgary en Alberta.

‘#GIRL4PRESIDENT’

Dentro de las múltiples iniciativas que desarrolla Plan Internacional, este año la ONG ha presentado el movimiento ‘#Girl4President’, con el objetivo de conseguir un millón de adhesiones por la igualdad de oportunidades, el acceso equitativo a la educación secundaria universal, gratuita, obligatoria y de calidad y la participación de las niñas en la toma de decisiones que afectan a su vida.

Este millón de apoyos serán remitidos a los centros de decisión política nacionales e internacionales para pedir a los líderes mundiales que los derechos de las niñas y adolescentes estén en el corazón de las agendas políticas.

En un acto celebrado el pasado 6 de octubre en el Congreso de los Diputados, con participación de todos los grupos parlamentarios, Plan Internacional presentó el noveno informe anual sobre la situación de las niñas y adolescentes en el mundo, bajo el título ‘Los asuntos pendientes de los derechos de las niñas’, donde diversas personalidades reflexionan sobre el papel de las niñas en la economía global, el trabajo para la igualdad con niños y hombres, las niñas en conflictos y emergencias y la brecha de género en las nuevas tecnologías. Muchos de los autores creen que los próximos años son cruciales para lograr una transformación histórica e importante y para la culminación de todos los esfuerzos realizados en la lucha por la igualdad de género.

OBJETIVO, LAS ADOLESCENTES

Por otra parte, las Naciones Unidas dedican esta jornada a las adolescentes, pues a pesar de los avances en cubrir los derechos y necesidades de las niñas de primera infancia, aún muchas menores no tienen apoyo frente a los matrimonios forzados, la continuidad en la educación y la salud reproductiva.

Así, bajo el lema ‘El poder de las adolescentes: la visión para el 2030’, la ONU valora los progresos obtenidos gracias a los Objetivos de Desarrollo del Milenio, pero aspira a que los planteados para 2030 como Objetivos de Desarrollo Sostenible sean una oportunidad “para considerar la importancia de la inversión social, económica y política en el poder de las adolescentes como un factor fundamental para romper la transmisión intergeneracional de la pobreza, la violencia, la exclusión y la discriminación y obtener unos resultados equitativos y sostenibles”.

La organización internacional sostiene que en el 2015, las niñas en su primera de vida tienen más posibilidades de ir a la escuela primaria, recibir vacunas vitales y sufrir menos por desnutrición y problemas nutricionales que en las generaciones anteriores. Sin embargo, no se ha invertido lo suficiente en corregir los retos a los que hacen frente las niñas cuando entran en la segunda fase de sus vidas.

Por ello, subraya la importancia de obtener una educación secundaria y superior, evitar el matrimonio infantil, recibir información y servicios relacionados con la pubertad y la salud reproductiva y protegerlas contra los embarazos no deseados, las enfermedades de transmisión sexual y la violencia de género.

(SERVIMEDIA)
11 Oct 2015
AHP/caa