El portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Ángel Alcázar, explicó este viernes, en declaraciones a Servimedia, que la última borrasca formada a partir de un huracán que afectó a España fue ‘Grace’, que “pasó relativamente cerca de Galicia y acabó al sur de Irlanda” en los primeros días de octubre de 2009.

Alcázar subrayó que en 2006 ocurrió una situación meteorológica similar con el huracán ‘Gordon’, que se transformó en una borrasca que también “pasó muy cerca de Galicia y luego evolucionó hacia el norte de Europa”.

Un año antes, en 2005, hubo dos episodios de mal tiempo por borrascas formadas a partir de un huracán. “Uno de ellos, el ‘Vince’, entró por el golfo de Cádiz y llegó a zonas del valle del Guadalquivir, y el otro, el ‘Delta’, afectó fundamentalmente a Canarias”, añadió.

Alcázar indicó que el último huracán transformado en borrasca que causó daños de cierta consideración fue el ‘Hortensia’, que “azotó Galicia” en 1984, y añadió que en las tres últimas décadas “seguramente no haya habido más” fenómenos de este tipo.

El portavoz de la Aemet apuntó que en todos los casos se trata de restos de un huracán porque al alcanzar España “pierden las características claras” de este tipo de fenómenos. “En el núcleo de los ciclones tropicales se suele crear un ojo cálido. Como van transitando por mares relativamente fríos, van enfriándose por debajo y perdiendo sus características”, apostilló.

LLUVIAS FUERTES EN EL NOROESTE

Por otro lado, Meteorología prevé que la borrasca ‘ex Joaquín’ procedente de la evolución del huracán ‘Joaquín’, que dejó al menos 16 muertos en el sureste de Estados Unidos, se aproximará a las costas de Galicia este sábado por la tarde, si bien llegará relativamente debilitada respecto a su intensidad en los días previos.

Por ello, en las próximas horas empeorará el estado de la mar en las zonas cercanas al recorrido de la borrasca (Altair y Charcot, al noroeste de la península), aunque la borrasca tenderá a debilitarse antes de alcanzar las costas occidentales peninsulares en la noche de este sábado.

Los frentes asociados a la borrasca traerán precipitaciones a partir de la tarde del sábado en el tercio occidental peninsular, que se extenderán de oeste a este en la península durante el domingo y se generalizarán el lunes debido a una inestabilización adicional de la atmósfera.

Las precipitaciones podrían ser localmente fuertes y persistentes en áreas del noroeste peninsular, y más débiles y dispersas cuanto más al este, por lo que en el área mediterránea solamente serán probables el lunes y el litoral sureste podría librarse de las lluvias.

Canarias también se verá afectada por la borrasca ‘ex Joaquín’, aunque en menor medida, debido al extremo sur de los frentes asociados a la vaguada, de manera que podría haber precipitaciones débiles, algo más intensas y probables en las islas de mayor relieve.

En cuanto a las temperaturas, subirán el sábado en buena parte de España y descenderán el domingo en amplias zonas del tercio central peninsular.

MEJORÍA A PARTIR DEL MARTES

Por otro lado, la Aemet augura que el próximo lunes, Día del Pilar, esté protagonizado por el tiempo inestable, asociado todavía a la actividad de los restos del ciclón ‘Joaquín’, con lo que podría llover en Baleares, Canarias y la mayor parte de la península, salvo en su extremo sureste. Las precipitaciones podrían ir acompañadas de tormenta en zonas del territorio peninsular y alcanzar intensidad fuerte o ser persistentes localmente en el área cantábrica.

Aunque aún existe incertidumbre en la predicción, Meteorología vaticina que las precipitaciones podrían disminuir en intensidad y extensión a partir del martes o miércoles de la próxima semana, de manera que quedarían restringidas al extremo norte peninsular y los dos archipiélagos.