Los ganadores, premiados con un viaje a Tenerife y una mini-cadena, fueron Luca Calcedo Orejón, de la residencia Francisco de Vitoria, en la categoría de carta más romántica; Félix Jiménez Gutiérrez, del centro de mayores Aluche, en la categoría de carta más simpática, y María Pilar Sánchez Cortázar, del centro de mayores Puente de Toledo, por la carta más motiva.

Por su parte, los premiados en las categorías de piropo más romántico y piropo más simpático fueron María Pilar Frutos Arribas, del centro de mayores Virgen de Begoña, y Teresa Martín Tello, de la residencia Francisco de Vitoria, respectivamente.

El concurso ha contado con la participación de 132 personas mayores, 70% mujeres y 30% hombres, siendo la edad media de 80 años. Los cinco ganadores han sido seleccionados entre 80 cartas de amor y 76 piropos.

Durante su intervención en el acto de entrega de los premios, la consejera de Familia y Asuntos Sociales afirmó que los participantes en el certamen han demostrado una magistral capacidad para expresar sus sentimientos, puesto que con los años se va cogiendo práctica y soltura a la hora de expresarse.

EL ARTE DE ENVEJECER

Hidalgo destacó, además, la alegría, el entusiasmo y el optimismo de las personas mayores, y recordó que hay que pensar en el envejecimiento como en algo positivo, ya que envejecer es un arte que requiere la capacidad de adaptarse a los nuevos tiempos y de afrontar los retos que se presentan en la vida.

Este concurso es una iniciativa de la Comunidad de Madrid que va ya por su octava edición y que se enmarca en una serie de planes específicos destinados a fomentar el desarrollo personal de los mayores, como pueden ser los programas de Baloncesto para Mayores o Cine para Mayores.

Así, las personas mayores de la región pueden disfrutar de hasta 157 actividades y talleres gratuitos que la Comunidad les ofrece a través de sus 32 centros, dependientes del Servicio Regional de Bienestar Social.

La oferta abarca desde cursos de idiomas e informática, hasta actividades físicas adaptadas, así como gimnasia de mantenimiento, taichí o yoga. En estos centros, también se programan actividades culturales, como rutas específicas de senderismo, visitas a museos y excursiones por los diferentes municipios de la región.