Con esta decisión se busca igualar las condiciones de promoción y desarrollo de carrera de todos los militares profesionales, haciendo coincidir el máximo de convocatorias para el ascenso a cabo y cabo primero en las escalas de tropa con el número máximo de ciclos para que un militar deje de ser evaluado para el ascenso a determinados empleos de otras escalas.

Al mismo tiempo, el Ejecutivo incorpora una mayor competitividad en los procesos selectivos de ascenso a estos dos empleos fundamentales de las escalas de tropa y marinería de los ejércitos elevando la base de aspirantes, lo que redundará, según el Gobierno, en una mejor gestión del personal favoreciendo que asciendan los más cualificados para el desarrollo de estos citados empleos.

Este real decreto fue informado durante su tramitación por las asociaciones profesionales con representación en el Consejo de Personal de las Fuerzas Armadas y se ha dado conocimiento del mismo a las asociaciones profesionales militares.