Durante su comparecencia en comisión en el Senado, Sebastián señaló que el apoyo financiero al mismo dependerá de que el ajuste que sufra la planta se haga bajo "criterios de rentabilidad y competitividad".

En todo caso, el ministro quiso dejar claro que General Motors "hasta la fecha no nos han pedido nada" sobre apoyo financiero a su proyecto.

El plan de Opel prevé la destrucción de 900 empleos en la planta zaragozana de Figueruelas, si bien mantendrá el nivel de producción actual.

"Es la hora de sentarse a discutir con la empresa", subrayó el titular de Industria, quien agregó que General Motors ha de tener claro que el ajuste para abordar su exceso de capacidad en Europa ha de recaer sobre "las plantas menos competitivas".

"Figueruelas es la planta más competitiva de General Motors en Europa, esto tiene que tenerlo siempre en cuenta", aseguró.

Por otra parte, el ministro defendió que el Gobierno ha sido "bastante activo" en este asunto y ha actuado con "transparencia".

Sebastián quiso recordar que lo que ha ocurrido en la planta zaragozana es una decisión empresarial, que toma una compañía "privada cuyo centro de decisión está lejos, habla otro idioma, comen a otras horas y se toman vacaciones en otras épocas".