Human Rights Watch pide a la ONU un embargo de armas a Siria

- Tras los bombardeos indiscriminados del pasado domingo en Duma

MADRID
SERVIMEDIA

Human Rights Watch (HRW) solicitó este jueves al Consejo de Seguridad de la ONU que imponga un embargo de armas al Gobierno sirio después de los ataques aéreos del pasado domingo en mercados populares y zonas residenciales de Duma (noroeste de Damasco), que mataron al menos a 112 personas e hirieron a otras 550.

HRW señaló que la Fuerza Aérea Siria llevó a cabo este domingo cuatro bombardeos con pocos minutos de intervalo entre unos y otros en los principales mercados de vendedores ambulantes en Duma, la ciudad más poblada de la asediada Ghouta Este, una zona controlada por grupos armados de la oposición.

Miembros de esta organización de derechos humanos hablaron con cuatro testigos de esos ataques, que aseguraron que no había objetivos militares próximos y que la base más cercana o de primera línea combatiente estaba al menos a dos kilómetros de distancia.

"El bombardeo de un mercado lleno de compradores y vendedores en plena luz del día muestra una atroz indiferencia del Gobierno sirio hacia los civiles", dijo Nadim Houry, subdirector para Medio Oriente de Human Rights Watch, quien añadió que “esta última masacre es otro recordatorio, si se necesitaba alguno todavía, de la necesidad urgente de que el Consejo de Seguridad actúe con sus resoluciones anteriores y tome medidas para detener los ataques indiscriminados".

Los testigos recalcaron a HRW que los cuatro bombardeos cayeron cerca del mediodía en tres mercados, conocidos como al-Ghanam, al-Hal y al-Houboub, y distantes entre sí a 500 metros. Dos de ellos describieron una escena caótica, con muertos y heridos esparcidos en las calles, y comentaron que habían encontrado cerca de 70 cadáveres y un gran número de heridos. Cinco minutos después de los cuatro ataques aéreos, las fuerzas del gobierno dispararon morteros y cohetes, matando a seis personas más.

Por la tarde, los ataques aéreos llegaron a una zona residencial de Duma conocida como Masaken o Abed al-Raouf. Un residente dijo a HRW que la ofensiva mató a al menos a 30 personas y que las fuerzas gubernamentales abrieron fuego al final del día a quienes trataban de enterrar a sus familiares en el cementerio.

El Consejo Local de Duma informó que los ataques del pasado 16 de agosto mataron a un total de 112 civiles e hirieron a otros 550, y la Oficina Médica Unificada de Duma, que coordina la atención médica en la zona, señaló que profesionales sanitarios realizaron 116 cirugías a heridos, entre ellas 9 amputaciones.

CORTE PENAL INTERNACIONAL

HRW subrayó que los de este domingo no fueron los primeros ataques contra mercados concurridos en Ghouta Este, ya que, según el Centro de Documentación de Violaciones en Siria, los ataques aéreos de las fuerzas gubernamentales han matado a al menos 462 civiles y 16 combatientes en esa zona entre enero y junio. No obstante, Human Rights Watch apuntó que los grupos armados que operan en Ghouta Este también han cometido ataques indiscriminados en barrios controlados por el Gobierno.

El 22 de febrero de 2014, el Consejo de Seguridad de la ONU exigió en su resolución 2139 que “todas las partes cesen inmediatamente todos los ataques contra la población civil, así como el empleo indiscriminado de armas en zonas pobladas, incluyendo bombardeos y los bombardeos aéreos.

El pasado lunes, un día después de los ataques en Duma, el Consejo de Seguridad emitió una declaración presidencial en la que reiteró su exigencia de que todas las partes pongan fin a los ataques contra la población civil, así como cualquier uso indiscriminado de armas en zonas pobladas en Siria.

Además de un embargo de armas, HRW exigió al Consejo de Seguridad de la ONU que remita la crisis de Siria a la Corte Penal Internacional y que ponga el mismo empeño en los ataques aéreos indiscriminados que con los ataques químicos.

(SERVIMEDIA)
20 Ago 2015
MGR/gja