Se trata del contenido del decreto aprobado el 14 de mayo y que el Gobierno aceptó tramitar mediante proyecto de ley, lo cual permite a los grupos parlamentarios presentar enmiendas. Mediante esa norma, se conceden créditos extraordinarios y un suplemento de crédito por importe de 856.440.673,35 euros en el presupuesto del Ministerio de Defensa, para atender al pago de obligaciones correspondientes a programas especiales de armamento y a la realización de otras actuaciones del departamento.

El proyecto tenía varias enmiendas de totalidad, ante las que el PSOE se abstuvo. Según su portavoz, Diego López Garrido, lo hicieron porque el proyecto es “absolutamente falso, irrelevante”, y el debate parlamentario es “una verdadera farsa”.

En la misma línea, el portavoz del Grupo de IU, ICV-EUiA, Cha: La Izquierda Plural, Álvaro Sanz, lo tildó de “pantomima” porque le Gobierno no tiene ninguna intención de debatir sobre el contenido de esos programas y la forma de afrontar los pagos, y mucho menos de llegar a acuerdos sobre ello.

Joseba Agirretxea, del PNV, dijo que su grupo es “crítico” con la metodología del Gobierno y con parte de los contenidos del texto. “No se puede legislar de esta manera”, denunció, al tiempo que pidió al Gobierno que no denuncie demagogia en la oposición porque cogiendo la norma “podemos hacer toda la que queramos”.

En nombre de los diputados de Convergéncia y de Unió, Jordi Xuclà denunció que hay “mucha gesticulación” en la tramitación como proyecto, entre otras cosas porque los pagos ya se deben de haber efectuado. Lamentó, en ese sentido, que no se aproveche la oportunidad para plantear un debate de fondo sobre el conjuno de la deuda en esta materia y cómo se debe afrontar.

Irene Lozano, de UPyD, acusó al Gobierno de intentar “blanquear” anteriores decretos sobre esta materia tramitando éste como proyecto. “El caos presupuestario de Defensa es inaceptable para un país como el nuestro”, alertó.

En nombre de ERC, Joan Tardà consideró “un tanto pornográfico” que el Gobierno pretenda hacer creer a los ciudadanos que son “los culpables” de la deuda con la que justifica los recortes mientras hay miles de millones de deuda “por la locura de los contratos armamentísticos”, la red “irracional” de AVE o “para servir al oligopolio de las eléctricas”.

También Joan Baldoví, de Compromís-Equo, denunció que esas deudas lastrarán las cuentas públicas hasta 2030.

Pilar Barreiro, del PP, juzgó “kafkiano” el debate, y se preguntó “qué hacemos aquí” si resulta que el único objetivo es ocultar el debate sobre la norma. “Nadie ha hablado de que hay que pagar lo que se debe”, dijo, y de que la defensa nacional “necesita armas modernas y de alta tecnología”.

Criticó además a quienes “se llenan la boca” cuando los militares españoles van a misiones de paz pero parecen ignorar que tienen que ir “bien pertrechados, con armamento moderno y eficaz”.