En una nota de prensa, el PP lamentó que el PSOE, "que hace tiempo fue la formación política alternativa", sea hoy "una triste sombra de sí mismo: dispuesto a ceder el gobierno a cualquier grupo radical, extremista, populista o independentista, con el único fin de impedir el gobierno de la lista más votada si ésta es del PP".

Los populares conceden que esta práctica "puede ser legal", pero la tachan de "mezquina y cortoplacista" y creen que "ha llegado a límites de auténtico desprecio a la voluntad popular" en casos como Marbella o Almería, donde el PP ha recibido un 40% de votos.

La nota cita también el caso de Badalona, que dará la Alcaldía a "independentistas" como ERC, y, el "más indigno": el de VItoria, donde el PSE pactará mañana con Bildu y el PNV para impedir gobernar a Javier Maroto, que sacó 10 puntos a las segunda fuerza, "los proetarras de Bildu".

El PP concluye que el secretario general socialista, Pedro Sánchez, "se desautoriza a sí mismo como líder de un partido nacional", porque no sólo puso al mismo nivel hace semanas al PP y a Bildu avisando de que serían los dos únicos partidos con los que no pactaría; "sus hechos han resultado ser aún peores" y "ha preferido pactar con Bildu si es para excluir al Partido Popular", algo, que intuye, ofenderá a muchos votantes socialistas.