David García, jefe de sección de Farmacia del Hospital de Parapléjicos, indicó que en muchas ocasiones la industria farmacéutica envasa los medicamentos en blíster y no se identifica en cada comprimido el nombre comercial, ni tampoco el principio activo, el lote y la caducidad.

Puesto que los hospitales dispensan a los pacientes todos los comprimidos identificados unitariamente, hay que "reenvasar o reetiquetar miles de medicamentos al año", agregó.

El programa diseñado por Parapléjicos tiene, además del control habitual (especialidad, principio activo, lote y caducidad), la opción de identificar a la persona que manipula el reetiquetado, así como la fecha y hora a las que se ha impreso la etiqueta.

"Dependiendo del tipo de etiqueta empleado, se puede ahorrar, frente al reenvasado tradicional, entre un 5 y un 19% de tiempo de auxiliar, y el coste del material puede disminuir hasta nueve veces", detalló el farmacéutico David García.

Hasta la fecha, más de una veintena de servicios de farmacia de hospitales de toda España se han interesado en el proyecto para ponerlo en marcha y, en algunos casos, ya está implantado con éxito.