Carceller declaró a Servimedia que la visita de José Manuel García-Margallo es un ejemplo “evidente” de que España ha terminado haciendo una “bajada de pantalones” ante el régimen castrista, porque, indicó, el ministro aseguró que nunca iría a Cuba si no tenía en su agenda encuentros oficiales y también con los disidentes. “No entendemos qué hacía allí el ministro cuando él había prometido no ir sin verse con la oposición”, remarcó.

Este exiliado político dijo que “nunca” entenderá por qué los “políticos españoles tienen una debilidad que jamás se justifica” con el régimen cubano. En este sentido, denunció que se sienten “muy molestos con la traición del Gobierno”, porque el PP, cuando en la pasada legislatura estaba en la oposición, criticó el viaje del entonces ministro socialista Miguel Ángel Moratinos a Cuba porque no se entrevistó con opositores, "y ellos ahora han repetido el formato".

Carceller recordó que cuando la visita de Moratinos en 2010, el PP mantuvo una “alta y constante crítica” contra el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero e incluso acompañó a los colectivos cubanos en España en sus protestas.

Desde este colectivo de cubanos en España aseguran que las autoridades castristas “siempre han humillado, vejado, o al menos intentado cuando menos, a las instituciones españolas”, y prueba de ello, dijo Carceller, es que pese a que no se visita a la oposición, García-Margallo vuelve de Cuba sin reunirse con Raúl Castro, el máximo dirigente del régimen cubano.