Catalá compareció en rueda de prensa en la sede de su departamento pasadas las nueve de la noche, una hora después de que en Cataluña cerrarán los centros públicos donde los ciudadanos han acudido a votar con motivo de la consulta separatista promovida por la Generalitat que gobierna Artur Mas.

“El proceso se ha llevado a cabo al margen de cualquier marco jurídico. No tiene amparo ni en las leyes catalanas ni en decreto de convocatoria alguno. Sus promotores han renunciado a cualquier apariencia de neutralidad, convertidos en juez y parte del proceso y ni siquiera se ha garantizado la igualdad de todos los catalanes ante el simulacro de consulta”, dijo.

Catalá recalcó que en la consulta de Artur Mas no se han cumplido “ninguno de los requisitos” propios de unas elecciones democráticas, por lo que resumió la jornada como un “acto de pura propaganda que carece de efectos políticos y que solo ha servido para exacerbar las división ente los catalanes y tensar las relaciones políticas dentro y fuera de Cataluña”.

Finalmente, el ministro de Justicia anunció que la Fiscalía General del Estado “continua recabando datos en el ámbito de las diligencias abiertas” para valorar en los próximos días “la existencia de responsabilidades penales y ejercer las acciones legales que correspondan”.