Durante su intervención en el citado desayuno informativo organizado en Madrid por Nueva Economía Fórum, Martina defendió que Europa “tiene que ganar el reto del cambio” y abordar la manera de reubicar el sistema agrícola y agroalimentario europeo, para lo que el área del Mediterráneo puede jugar un papel protagonista.

Martina subrayó que hay “mucho potencial” y “muchas oportunidades” de construir un frente común en algunos de los principales temas agrícolas a nivel europeo, por lo que España, Francia e Italia deben “relanzar” la “experiencia” del área del Mediterráneo, aprovechar sus potencialidades y apostar por los alimentos de calidad.

Asimismo, calificó de “idea totalmente insensata” el presentar al norte de Europa como el área de innovación y al sur como el área de conservación, y consideró que a la hora de hablar de la Estrategia 2020 de la UE, la agricultura y el sector agroalimentario “no podrán ser sectores marginales”, sino que tendrán que ser “ejes fundamentales”.

A su juicio, hay que dar “un paso al frente” y no quedarse solo en la ideología “de la austeridad” en la que “sólo cuentan los guarismos de algunos valores y no la economía real”. “Tenemos posibilidad de dar un paso al frente, de contribuir al debate europeo respecto al ámbito agroalimentario para que progrese”, añadió.

En este sentido, el ministro italiano resaltó que el área del Mediterráneo se configura como una parte “fundamental” que Europa “puede utilizar para reforzarse”, y apostó por la colaboración frente a la tradicional competencia en algunos sectores, como por ejemplo el vitivinícola o el oleícola, con España.

COLABORACIÓN CON ESPAÑA

En cuanto a las materias de colaboración con el Gobierno español, Martina citó el trabajo conjunto en el área hortofrutícola o el sector lácteo, y abogó porque ambos países soliciten que el Banco Europeo ayude a los jóvenes empresarios que deseen apostar por el sector agrario.

Otros aspectos de cooperación entre ambos países apuntados por Martina fueron la protección y garantía de las denominaciones de origen y las indicaciones geográficas, la lucha contra el fraude y la contribución en el sector vitivinícola y aceitero.

También apostó por la innovación y las nuevas tecnologías en el sector como uno de los pilares comunitarios, con los 4.000 millones de la UE destinados para los próximos años en este ámbito, así como por la agricultura ecológica.

El ministro italiano también resaltó que España tiene “todas las papeletas” para ser “uno de los grandes protagonistas” de la exposición universal de Milán referida al sector agroalimentario, que tendrá lugar después de la de Shanghai y antes de la prevista en 2020 en Dubái, y que traerá a Europa el gran tema “geopolítico” sobre la alimentación en el mundo.

Con 1,2 millones de empresas pertenecientes al sector primario en Italia, de las que 50.000 son de agricultura biológica, el titular de Agricultura italiano valoró la importancia de la Política Agraria Común (PAC) para el sector, ya que sin ella tendría “grandes dificultades” para su mantenimiento.

De igual forma, se refirió al “campo de oportunidades” que se abrirá en los próximos 15 años, en los que se espera que 800 millones de ciudadanos alcancen la franja de la clase media y abandonen el umbral de la pobreza.