En la carta, publicada en 'El caballo de Nietzsche', blog de 'Eldiario.es', Limón señala que, "aunque ya no estés con nosotros, te prometo que se hará justicia".

El marido de la auxiliar de enfermería que atendió a los misioneros Miguel Pajares y Manuel García Viejo continúa dirigiéndose a su perro para decir: "Excálibur, donde quiera que estés, sabes que los amitos siempre te llevarán en su corazón. Acabaron contigo gente mala y sin sentimientos. Hicimos todo lo que pudimos y más para salvarte, pero al final no pudo ser", lamenta.

"Mientras te escribo esta carta no paro de llorar, pero estoy muy orgulloso de ti porque has sido un ejemplo para el mundo entero y no serás olvidado tan fácilmente. Ahora, desde donde estés, tienes que darle fuerzas a la amita para que se ponga buena, igual que me las has dado a mí para no venirme abajo y seguir luchando", añade.