Desde hace 14 años, la Fundación Madrina ofrece apoyo y ayuda a madres y mujeres embarazadas sin recursos. Su objetivo es prestar a estas mujeres las ayudas necesarias en salud, empleo, residencia y acompañamiento para que puedan conseguir una vida estable. Según el consejero, la labor de los voluntarios de la fundación “es la piedra angular de los proyectos que allí se realizan”.

La ayuda de la fundación incluye desde pisos de acogida hasta formación y asesoramiento en la búsqueda de empleo. Conrado Giménez, director, presidente y fundador de la Fundación Madrina, aseguró que entre las mujeres que acuden al centro se está consiguiendo un nivel de empleabilidad del 80%. “Estas mujeres son emprendedoras, valientes y tienen el coraje de empezar nuevos proyectos para conseguir una vida mejor para ellas y sus hijos”, indicó.

Fermosel destacó el voluntariado corporativo que se lleva a cabo en esta entidad, donde colaboran “voluntarios que dan sus conocimientos técnicos y su experiencia profesional en favor de mejorar la vida de las personas que se acercan a la fundación en busca de un futuro mejor”.

Ángela, voluntaria de la guardería de la Fundación Madrina, explicó que el voluntariado es fundamental para ayudar a estas mujeres, porque mientras ellas asisten a los cursos de formación, tienen un lugar donde dejar a sus pequeños, puesto que muchas veces los crían solas.

Para Érika, una madre que tuvo a su bebé hace una semana, la Fundación Madrina ha sido un lugar donde refugiarse y donde ha conocido a personas que se han convertido en parte de su familia. “Cuando vine a España acudí a la fundación y allí encontré apoyo sociosanitario y emocional que me ayudó mucho a afrontar mi embarazo con positividad”, explicó.

La Fundación Madrina es una de las más de 1.100 entidades de voluntariado que están dadas de alta en la base de datos que gestiona la Consejería de Asuntos Sociales, en las que colaboran más de 150.000 voluntarios.