El Monarca recibió en primer lugar al presidente del Gobierno de Baleares, José Ramón Bauzá, y seguidamente mantuvo, a lo largo de la mañana, sendas audiencias con la presidenta del Parlamento autonómico, Margalida Duran; el alcalde de Palma de Mallorca, Mateu Isern, y la presidenta del Consejo Insular de Mallorca, Maria Salom.

Al finalizar la audiencia, el presidente Bauzá aseguró que no había tratado con el Rey determinadas prácticas realizadas en la isla por turistas. “Nuestro modelo de turismo pretende la excelencia”, señaló el jefe del ejecutivo, quien agregó que Felipe VI quiere seguir pasando sus vacaciones en las islas.

En el encuentro, el presidente regional trasladó al jefe del Estado sus preocupaciones sobre las prospecciones petrolíferas proyectadas en las Baleares, así como por la conectividad aérea y la financiación. Asimismo, el Monarca confirmó su voluntad de salir a navegar, aunque su agenda es apretada, dijo Bauzá.

Por su parte, la presidenta del Consell de Mallorca, Maria Salom, agradeció al Rey sus palabras de ayer sobre Mallorca, isla de la que dijo que es “un trozo de cielo en la tierra”. El alcalde, por otro lado, afirmó que el Monarca le felicitó por la revitalización de la ciudad durante los últimos años.