A través de un comunicado, la asociación expresó su malestar acerca de los apuntes que calificaban la transexualidad de “patología psíquica” y criticaban el “modo de vida gay”. La entidad emplazó al Vicerrectorado de Docencia y Relaciones Institucionales a leer el Diagnóstico y Manual Estadístico de Trastornos Mentales (DSM-5), en el que la transexualidad ha sido descatalogada como enfermedad. Asimismo, recordó que la homosexualidad dejó de ser considerada una patología en el año 1990.

“Emitir juicios de valor en base a clichés como un supuesto ‘modo de vida gay’ es ejercer una actividad docente basándose en un prejuicio que una universidad nunca puede amparar, porque vulnera la dignidad de las personas, así como su honor”, señaló la asociación en el comunicado.

“Estos apuntes forman al futuro profesorado en actitudes homófobas y tránsfobas de cara a sus alumnos y propugnan un juicio de valor completamente subjetivo y altamente dañino sobre lesbianas y gais, teniendo en cuenta que muchos de sus propios alumnos pueden no haber salido del armario mientras lo estudian”, declaró la coordinadora de Arcópoli, Amanda Rodríguez.

Por su parte, la Universidad de Extremadura ha reestructurado el departamento de Sociología del que formaba parte la autora de los apuntes. Asimismo, los contenidos retirados del campus virtual no han vuelto a ser puestos en circulación y se ha abierto una investigación al respecto.

El Gobierno de Extremadura calificó ayer de “reprochable” que la Universidad de Extremadura distribuyese estos apuntes entre sus estudiantes y solicitó “la máxima sensibilidad cuando se abordan asuntos relacionados con la libertad de elección de las personas, entre ellas las relacionadas con la opción afectivo sexual que decida cada individuo”.