La lista está formada por los pilotos de ciclismo en tándem Judit Masdeu (que compite con Josefa Benítez), David Llauradó (con Christian Venge), Joan Font (con Ignacio Ávila) y José Antonio Villanueva (con José Enrique Porto); los porteros de fútbol 5 para ciegos Raúl Díaz y Pedro Gutiérrez; los guías de esquí alpino Miguel Galindo (con Jon Santacana) y Josep Arnau (Gabriel Gorce), y la guía de triatlón María Mayalen Noriega (con Susana Rodríguez).

Esta nueva consideración para los deportistas de apoyo supone un paso decisivo en la normalización de la discapacidad en la más alta categoría de la alta competición, según informó el Consejo Superior de Deportes.

Recientemente, el CSD integró el deporte paralímpico dentro de la Subdirección de Alta Competición, sin que haya distinciones en su tratamiento como deportistas de alto nivel, que es el que, por sus méritos deportivos, alcanza los máximos reconocimientos en la competición, sin que la discapacidad se convierta en un elemento diferenciador ni siquiera en el departamento ministerial al que esté adscrito.

“Remover los obstáculos para hacer posible la igualdad real es un objetivo que la Constitución española exige a los poderes públicos y hoy el CSD, a través de la Comisión de Deportistas de Alto Nivel, ha hecho que esa aspiración sea una realidad”, señaló Muñoz.

En la despedida de los componentes del equipo español en su marcha a los Juegos Paralímpicos de Sochi 2014, el pasado mes de febrero en la sede del CSD, el presidente del Comité Paralímpico Español, Miguel Carballeda, expresó la necesidad de que este reconocimiento se produjera, para evitar una situación de discriminación real que entonces se llevaba a cabo.

Jon Santacana y su guía Miguel Galindo, abanderados de la expedición, señalaban entonces que sus éxitos no se podían entender sin su trabajo conjunto, al unísono y en igualdad de condiciones.

REQUISITOS

La Comisión de Deportistas de Alto Nivel reconoce ya esta consideración y los deportistas de apoyo deberán reunir una serie de requisitos para poder tener la consideración de deportistas de alto nivel: competir junto a un deportista con discapacidad que tenga la condición de deportista de alto nivel; realizar una actividad deportiva que requiera esfuerzo físico, tanto en entrenamientos como en competición; que el deportista desarrolle su actividad en competición de forma simultánea y a lo largo de toda la prueba, y que ambos estén reflejados en la clasificación oficial del campeonato y reciban la medalla conjuntamente en el mismo acto de premiación.

Con esta aprobación, los nueve deportistas de apoyo que han logrado subir al podio en competiciones internacionales este año con sus compañeros con discapacidad, que sí habían sido reconocidos anteriormente como deportistas de alto nivel, adquieren los mismos beneficios fiscales, medidas laborales, de inclusión en la Seguridad Social, o de acceso a la universidad que contempla el Real Decreto 971/2007, de 13 de julio, sobre deportistas de alto nivel y de alto rendimiento.

El Comité Paralímpico Español aplaudió esta decisión, que ya había sido trasladada en diferentes ocasiones a la Comisión y que hasta la fecha no había recibido su aprobación.