Madrid. Denuncian que Sanidad no considere un problema que personas convivan con cientos de animales enfermos en la Cañada Real

MADRID
SERVIMEDIA

La Sociedad Protectora de Animales y Plantas de Madrid (SPAP) denunció este jueves que la Comunidad de Madrid no vea como problema de salud pública la convivencia de niños y adultos con cientos de animales enfermos y moribundos en la Cañada Real.

Esta asociación, que actúa casi a diario en esta zona junto con otras entidades protectoras de animales, como ANAA, ALBA y Justicia Animal, consideró “imprescindible” que se tomen medidas para solucionar esta situación y lamentó la exclusión de este problema en los grupos de trabajo de la Mesa Social para la Cañada Real.

El presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, presentó el pasado 24 de junio la constitución de esta Mesa Social, presidida por el consejero de Asuntos Sociales, Jesús Fermosel, la cual está formada por cuatro grupos de trabajo, relativos a educación, sanidad, empleo y asuntos sociales.

El de asuntos sociales echó a andar el pasado lunes, el de educación este miércoles y el de sanidad comenzó a rodar este jueves, en la Consejería de Sanidad. Sin embargo, la abogada de la SPAP, Arancha Sanz, fue excluida porque, según su testimonio, representantes de esta consejería consideraron que “de ninguna manera tiene cabida” la realidad en la que viven los animales en la zona y los problemas potenciales que supone para la salud de niños y aduntos.

La SPAP subrayó en un comunicado que el tramo de la Cañada Real cercano a Valdemingómez engloba un área de varios kilómetros de extensión, asentamientos de chabolas y una zona municipal donde están ubicadas las plantas de tratamiento de residuos del Ayuntamiento de Madrid.

Destacó que en este entorno, donde anidan grandes problemas sociales como el analfabetismo y la drogadicción, también se ha hecho hueco “una alarmante y tercermundista convivencia con los animales”, puesto que “miles de adultos y niños comparten espacio a diario con animales en pésimas condiciones higiénicas y de salud”.

“PROLIFERACIÓN DESCONTROLADA”

La SPAP afirmó que, “de manera bastante generalizada, la población de Valdemingómez practica la cría de todo tipo de animales en condiciones precarias”. “Por ejemplo, los perros son criados bien para caza (no reglada), bien para peleas ilegales. Esta situación, prolongada en el tiempo y sin ningún tipo de control veterinario, unida a habituales malos tratos y abandonos, han provocado la proliferación absolutamente descontrolada de animales en un estado lamentable. Principalmente se trata de perros y gatos, pero también hay gallinas, caballos, conejos, zorros e, incluso jabalíes en pésimas condiciones higiénicas”, apostilló.

Además, apuntó que la cercanía de las instalaciones de residuos municipales provoca que muchos de estos animales acaben en ellas, “unas veces por su propio pie, buscando refugio y comida, y otras introducidos por sus dueños, vivos, agonizando o muertos. De cualquier modo, el final de la mayoría de ellos es la muerte, por desnutrición, intoxicación o atropello”.

“Todo esto conlleva, además de un explícito maltrato animal constitutivo de delito penal, serios problemas también para los trabajadores municipales de las propias instalaciones y de la recogida de residuos. La presencia de animales vagando, todos ellos en malas condiciones, en estas zonas de alta actividad y tráfico constante de vehículos pesados puede provocar accidentes tanto en los recintos como en las vías de acceso”, añadió.

La SPAP apuntó que la protección animal no es el único punto descartado en el grupo de trabajo de sanidad, ya que el personal del Equipo de Intervención con Población Excluida (EIPE) que trabaja en la Cañada Real desde 2007 tampoco fue convocado a la reunión, pese a haberlo anunciado la Comunidad de Madrid.

(SERVIMEDIA)
17 Jul 2014
MGR/gja