RSC. Las plantaciones de aceite de palma contaminan el agua de las comunidades de Indonesia

MADRID
SERVIMEDIA

Las plantaciones de aceite de palma que se están extendiendo por Indonesia, de las que se nutre gran parte de la industria alimentaria mundial, están provocando la contaminación del agua potable en las poblaciones cercanas.

A los problemas de deforestación de los bosques tropicales, la pérdida de biodiversidad, las condiciones laborales de los trabajadores que están en las explotaciones, se añaden ahora la contaminación del agua que consume la población local como consecuencia del uso de pesticidas y los métodos de extracción del aceite de palma, según un estudio llevado a cabo por científicos de las universidades de Standford y Minnesota.

Los expertos han encontrado evidencias de como la eliminación de la vegetación a lo largo de las riberas de los ríos y la destrucción de la vida vegetal supone la pérdida de sustento de la fauna, así como de zonas de sombra. Además, la limpieza de los terrenos y el uso de productos químicos, así como el sistema de procesamiento de las frutas de las que se extrae el aceite provocan el envío de sedimentos y sustancias nocivas en los arroyos que discurren por las plantaciones.

El equipo de investigadores liderados por Lisa M. Curran, profesora de antropología ecológica en Stanford, centró su estudio en los pequeños arroyos que fluyen a través de las plantaciones de aceite de palma, la pequeña agricultura y los bosques en y alrededor del Parque Nacional de Gunung Palung, en la isla de Borneo.

Los científicos encontraron que las temperaturas del agua en los arroyos de drenaje de las plantaciones recientemente despejadas eran casi 4 grados celsius más altas que los arroyos del bosque lo que provoca una perdida de organismos vivos. Además, las concentraciones de sedimentos eran hasta 550 veces mayor. También registraron un aumento en el metabolismo del arroyo, que es la velocidad a la que una corriente consume el oxígeno, durante las épocas de sequía.

El impacto de estos cambios de uso del suelo en materia de pesca, en las zonas costeras y los arrecifes de coral no está claro, ya que este estudio es uno de los primeros en examinar los efectos de la palma aceitera en los ecosistemas de agua dulce. "Las comunidades locales están muy preocupadas por sus fuentes de agua dulce. Sin embargo, el impacto a largo plazo de las plantaciones de palma aceitera en las corrientes de agua dulce ha sido completamente pasado por alto hasta ahora", asegura Curran.

En las investigaciones previas llevadas a cargo de Curran y Kimberly Carlson han llegado a la conclusión de que entre 2000 y 2013, las tierras de Indonesia que se utiliza para el cultivo de palma se ha triplicado, y que alrededor del 35 por ciento de las tierras bajas no protegidas de Indonesia en Borneo podrían ser utilizadas para la producción del aceite de palma en los próximos años.

(SERVIMEDIA)
17 Jul 2014
JAL/gja