Con el objetivo de evaluar las necesidades formativas de los profesionales de la Medicina y conocer su evolución, la OMC creó en 2010 la Fundación para la Formación, una herramienta con la que se ha creado una red de cursos y actividades formativas 'online', presenciales y mixtas a través de las cuales los profesionales médicos pueden recibir formación en diferentes áreas.

Además, tiene la función de que todos los colegiados puedan acceder a las actividades desde cualquier lugar de España y colaborar con toda la sociedad científica.

“La formación y la investigación es la base fundamental de un buen profesional médico, es como el respirar”, afirmó Rodríguez. “Nosotros formamos a los profesionales desde distintos puntos de vista: científico, económico, ético y político, y de esta manera podemos ser autónomos e independientes, es decir, no estamos influidos por los intereses ajenos a los pacientes y al sistema”.

Esta formación es transversal, lo que significa que se realizan actividades que abarcan ámbitos que todos los profesionales médicos deberían conocer, como ética y deontología, comunicación, derecho sanitario, gestión clínica o RCP.

Cardiología, medicina familiar y comunitaria, pediatría, endocrinología y nutrición, psiquiatría y neurología son las actividades que más demandan los colegiados y que fueron objeto de las acciones formativas.