País Vasco. Munilla apela a la comprensión tras su nombramiento como obispo de San Sebastián
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
El nuevo obispo de San Sebastián y anterior prelado palentino, José Ignacio Munilla, se presentó “pobre y humilde” y solicitó la comprensión ante su “pequeñez” y “buena voluntad” en la acogida de sus palabras tras ser nombrado nuevo obispo de la diócesis donostiarra. Emocionado, recibió el báculo y la mitra haciendo efectivo su nombramiento tras fundirse en un abrazo fraternal con el nuncio del Papa Renzo Fratini y con su antecesor Juan María Uriarte.
Una larga ovación de los feligreses, que abarrotaban la catedral del Buen Pastor de San Sebastián, acompañó el momento en que Munilla ocupó la cátedra, que se prolongó durante más de siete minutos, en los que familiares de la parroquia y algunos de los cerca de treinta obispos y sacerdotes presentes en la ceremonia se han acercado a felicitar al recién nombrado obispo donostiarra. Dos horas antes de que a mediodía arrancara la misa solemne cientos de personas colmaron hasta el último rincón del templo.
“El factor mediático tan influyente” en estos días contribuye “fácilmente a construir castillos en el aire, a ver gigantes donde sólo hay molinos, a engrandecer a quienes lejos de ser supermanes tan solo son unos peregrinos más en el camino de la vida; o tal vez, a juzgar como demonios a quienes simplemente comparten nuestra misma condición pecadora", dijo en su intervención Munilla.
Tras esta afirmación manifestó su "inevitable sensación de que las expectativas" que muchos de los asistentes podían tener "son muy superiores a lo que quepa esperar" del nuevo obispo y ha solicitado la comprensión de los feligreses ante su "pequeñez", además de la "buena voluntad en la acogida" de sus palabras.
Asimismo, difundió un mensaje de unión y de trabajo a favor de la diócesis donostiarra. "Mi intención es la de entroncarme plenamente en el recorrido de nuestra diócesis, sumando mis esfuerzos al proyecto pastoral de una Iglesia al servicio del Evangelio. Caminaremos juntos, creciendo en comunión entre nosotros, en plena apertura y obediencia a las orientaciones de nuestro querido Papa, Benedicto XVI", subrayó.
En este sentido, el nuncio Fratini, encargado de dar lectura a la bula, documento oficial del nombramiento, y hacer entrega del báculo y la mitra a Munilla, afirmó que el método adecuado para cuidar la unidad señala la exigencia del amor, que "acoge con espíritu de fe antes que anteponer el propio punto de vista y sabe postergar los prejuicios, sobre todo si no ha visto actuar". Por su parte, Uriarte mostró su apoyo a su sucesor y aseveró que a Munilla no le faltará su "cercanía, su consejo y parecer en la medida en que lo estime necesario".
Varios millares de personas se han dado cita en la catedral donostiarra para ser testigo de este nombramiento que pone fin a casi una década bajo la dirección de monseñor Uriarte en la Diócesis de San Sebastián. Varios representantes institucionales han querido acompañar a Munilla en esta eucaristía, como es el caso de la presidenta del Parlamento Vasco, Arantza Quiroga, y de las numerosas autoridades procedentes de Palencia, como el alcalde de la ciudad, Heliodoro Gallego, o el delegado Territorial de la Junta, José María Hernández, el presidente y la vicepresidenta de la Diputación, Enrique Martín e Inmaculada Roja, entre otros.
Desde la organización del evento señalaron que debido a las condiciones meteorológicas adversas numerosos autobuses de feligreses no consiguieron desplazarse hasta la capital guipuzcoana para estar presentes en este acto. De igual manera, una decena de obispos procedentes de Logroño, Huesca, León y Lleida, entre otros lugares, no han podido acudir a la cita, en la que tampoco ha podido verse al obispo emérito de San Sebastián, José María Setién, ni al alcalde de la ciudad, Odón Elorza.
(SERVIMEDIA)
09 Ene 2010
PAI