Para realizar el informe se realizaron pruebas teniendo en cuenta la seguridad a través de choques frontales y laterales, la facilitad de uso y la ergonomía, las sustancias peligrosas, el confort, la limpieza y la confección. Las sillitas fueron divididas según las categorías de peso.

La principal conclusión de este trabajo es que 8 de los 33 modelos de sillita infantil analizados (un 24,2%) reciben una calificación final de ‘insatisfactorio’ o ‘muy insatisfactorio’, mientras que otras 5 (15,2%) aprueban con una nota de ‘aceptable’, 19 (57,6%) obtienen un ‘satisfactorio’ y sólo 1 (3%), un ‘muy satisfactorio’.

La silla con la nota más alta es la de Recaro Privia & Recaro Fix, para niños de hasta un año y medio, aproximadamente.

Por el contrario, las peores calificaciones corresponden a cinco sillitas también para niños de hasta un año y medio: ABC Design Risus & Risus Isofix Base, Inglesina Huggy Prime, Inglesina Huggy Prime & Base Huggy Isofix, Silver Cross Simplicity y Silver Cross Simplicity & ISOFIX-Base.

El RACE recordó que, a pesar de que los datos de siniestralidad en España durante el año pasado llegaron a mínimos históricos, las cifras sobre accidentes en el grupo de edad de menores de 12 años es todavía alta, al contabilizarse 23 niños fallecidos, de los cuales un 43% viajaba sin ningún sistema de retención infantil.

Subrayó que para que un sistema de retención infantil sea fiable y pueda conseguir los objetivos de proteger a los menores, hay que tener en cuenta la calidad del producto, el uso en combinación a los sistemas equipados en el vehículo vehículo y su correcta instalación, factores con los que se puede reducir hasta en un 75% las lesiones en caso de accidente o impacto.