El presidente de la SIP, Elizabeth Ballantine, pidió al tribunal que falle este fin de mes contra la decisión del Gobierno venezolano de no renovar la concesión de RCTV y de "no reparar el daño en represalia por su línea editorial", lo cual es "una flagrante violación a los principios de libertad de expresión establecidos en la Convención Americana”.

El Gobierno de Caracas, por orden directa del entonces presidente Hugo Chávez, cerró la emisora RCTV y confiscó sus 48 estaciones repetidoras y equipos de transmisión. Un nuevo canal público comenzó a operar después de que fueran desconectados los equipos de la estación.

Es la Televisora Venezolana Social (TVes), patrocinada principalmente por el Estado venezolano, que ocupa las frecuencias que anteriormente tenía RCTV y opera en todo el país utilizando los transmisores pertenecientes a la emisora.