Suárez. La capilla ardiente se abre a los ciudadanos que quieran despedirse del expresidente

MADRID
SERVIMEDIA

A las doce del mediodía quedó abierta a los ciudadanos la capilla ardiente del expresidente del Gobierno Adolfo Suárez, instalada en el Congreso de los Diputados.

Desde primera hora de la mañana, los ciudadanos comenzaron a hacer cola en las inmediaciones del Congreso, esperando poder entrar al Palacio de la Carrera de San Jerónimo.

La capilla ardiente se abrió a las diez de la mañana pero solo para autoridades. A esa hora el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy; los presidentes del Congreso de los Diputados y del Senado, Jesús Posada y Pío García-Escudero, y los del Tribunal Constitucional y del Supremo y CGPJ, Francisco Pérez de los Cobos y Carlos Lesmes, recibían el féretro de Suárez acompañado de su familia.

Poco después llegaban los Reyes y la infanta Elena, que permacieron cerca de media hora en el Congreso. El Rey impuso a Suárez el Collar de la Real Orden de Carlos III a título póstumo concedido por el Consejo de Ministros.

Después de los Reyes y la infanta, Gobierno, expresidentes y parlamentarios, representantes de otras instituciones acudieron también a la capilla ardiente para despedirse de Suárez.

A las doce, las puertas del Congreso se abrieron también para los ciudadanos que desean despedirse del expresidente. Podrán hacerlo hasta las diez de la mañana del martes. Después, los restos serán trasladados a la catedral de Ávila, donde recibirán sepultura.

(SERVIMEDIA)
24 Mar 2014
CLC/caa